Yo estoy totalmente de acuerdo contigo, y de hecho, he hecho mi vida en un pueblo y aunque ahora estoy fuera de casa estudiando, mis planes de futuro son estar allí y hacer en él mi vida. Me encanta y no quiero que se muera, me gusta también mucho la ciudad, está cerca, pero el momento tan crítico que viven los pueblos del país hace que me decante por la vida en el pueblo. Lo jodido va a ser encontrar un trabajo en la zona, o poderme montar por mi cuenta, tardaré unos añitos pero, lo que está claro es que no quiero pasar mi vida fuera de él.
En cuanto a qué cosas poder hacer en un pueblo pues... eso también depende de las habilidades de cada uno. Yo soy traductor, y si tuviera clientela viviría perfectamente en un pueblo, mejor que en ningún sitio, sólo me haría falta un escape al mundo exterior obligado, es decir, dar unas clases a la semana en algún sitio, colaborar en la capital en algo etc para no agobiarme solo en mi casa. En ese sentido yo podría incluso tenerlo fácil.
El turismo rural es más sacrificado aunque muy gratificante, pero por ejemplo una tienda o un bar en un pueblo suelen dar bastante dinero, o al menos para vivir holgadamente con una inversión que no es demasiada.