TEMOR A LA ERDAD CIENTÍFICA.
La Iglesia siempre lo ha tenido, se encuentra muy cómoda ella sobre sus antiquísimas mentiras, y más cómoda aún cuando la gente se encuentra también cómoda en ellas...
Es la historia de siempre, ¿cómo alguien puede decir que es mejor no saber algo? Será porque si se sabe le perjudicarán, ¿no? Y ¿cómo le puede perjudicar? ¿Se le acabará su gran negocio?
A medida que el conocimieno científico occidental se ha ido desarrollando la Iglesia ha ido periendo adeptos... es decir, poder. Esa es la explicación de sus temores.