Si al final la fama está mal repartida... ¡Y todos las prefieren morenas! Y tanto que se gasta la peña en tintes, camomilas y mechas... y nada, al final lo de casa.
Que ironía gasta el Señor, hermanos...
Por cierto, eso que llamais
castellanismo (suena bonito, aunque su supuesto equivalente
vasquismo tiene connotaciones más feas), ni sabia que existía (perdonen la ignorancia, aquí estoy solucionandola con personas tan doctas), espero que arraigue con fuerza...

