Aunque escrito en el año 2008, el artículo siguiente trata un tema siempre vigente: de cómo las zonas de Castilla y León limítrofes con otras autonomías (más prósperas) acaban identificándose con éstas. En este caso, se trata de la inclinación hacia lo aragonés de ciertas poblaciones de Soria (comarcas de Medinaceli, Campo de Gómara, Moncayo), así como la identificación de Montenegro de Cameros con La Rioja.PUEBLOS RAYANOS
Cuando la vida es más fácil fuera del límite geográfico
La semana pasada Montenegro de Cameros cuestionaba su futuro en Soria alegando abandono institucional, una situación que, aunque no está tan acentuada en otros municipios, también comparten su cercanía a las provincias que tienen cerca de sus términos
La semana pasada el Ayuntamiento de Montenegro de Cameros se planteaba iniciar los trámites para su segregación de la provincia de Soria y solicitar anexionarse a la Comunidad de La Rioja. Su alcalde, José García Olalla, alegaba “discriminación institucional y abandono de todos los servicios”, después de que el fin de semana anterior la carretera de acceso a la localidad quedara sin limpiar, ya que no llegó ni una máquina quitanieves hasta la zona, un “mal que acecha a este pueblo todos los inviernos”.
Aunque el mayor punto de discordia es el abastecimiento del punto de nieve desde la Fuente de la Miel (en término de Montenegro), que tiene enfrentado al Consistorio de Montenegro con el Ayuntamiento de Soria y la Mancomunidad de los 150 Pueblos, desde hace ocho años, y que el alcalde se lamenta de que las adminsitraciones provinciales no hayan intervenido en defensa de su municipio ante un abastecimiento “ilegal”.
Si a esto se le añade que para los servicios sanitarios los vecinos de Montenegro tienen que acudir a La Rioja, en virtud de un convenio de la Junta de Castilla y León con el Gobierno riojano, y que la distancia por carretera es similar a Logroño que a Soria (57,4 kilómetros a la capital riojana, frente a los 60,8 a Soria), no sería descabellado que esta localidad pasara a formar parte de la Comunidad de La Rioja. De hecho, en algunos sitios web, como la Guía Campsa, Montenegro ya figura como localidad de La Rioja.
Lo cierto es que la situación de Montenegro la viven cada día otras localidades rayanas de la provincia. Es el caso de Ágreda, que también se beneficia de un convenio sanitario entre la Administración regional y el Gobierno de Aragón. Además, entre otros aspectos que vinculan a los vecinos de Ágreda con las tierras mañas son el prefijo de Zaragoza (976), o su participación en las ligas de fútbol, con los equipos de la provincia aragonesa. También ocurre con Monteagudo de las Vicarías, Iruecha, Barahona o Santa María de Huerta, en la ‘frontera’ con Guadalajara.
Pero el procedimiento para conseguir la segregación de Montenegro, o de cualquier municipio que solicite esta separación es arduo porque según el artículo 141 de la Constitución cualquier alteración de los límites provinciales habrá de ser aprobada por las Cortes Generales mediante ley orgánica. Así, el planteamiento de Montenegro de Cameros, no sigue un camino administrativo sino que requiere una iniciativa legislativa.
Es más, la pretensión va más allá, puesto que se trata de modificar límites autonómicos. Y es que cualquier reforma de cualquier Estatuto de Autonomía necesita también de una ley orgánica en virtud del artículo 147.3 de la Constitución: “La reforma de los Estatutos se ajustará al procedimiento establecido en los mismos y requerirá, en todo caso, la aprobación por las Cortes Generales, mediante ley orgánica”.
Porque la ley orgánica, frente a la ley ordinaria se presenta como proyecto o como proposición de ley, y que requiere el voto favorable de la mayoría absoluta de los miembros del Congreso de los Diputados en una votación final sobre el conjunto del proyecto para ser aprobada. Además, el Congreso de los Diputados debe realizar una votación final, al acabar con todos los trámites, donde la ley debe obtener una mayoría absoluta para su aprobación.
Además, según el artículo 13 de la Ley de Bases del Régimen Local, la creación o supresión de municipios, así como la alteración de términos municipales, se regularán por la legislación de las comunidades autónomas sobre régimen local, sin que la alteración de términos municipales pueda suponer, en ningún caso, modificación de los límites provinciales. Requerirán en todo caso audiencia de los municipios interesados y dictamen del Consejo de Estado o del órgano consultivo superior de los Consejos de Gobierno de las comunidades autónomas, si existiere. Simultáneamente a la petición de este dictamen se dará conocimiento a la Administración General del Estado.
MONTEAGUDO DE LAS VICARÍAS
La mayoría de poblaciones “rayanas” de la comarca de Medinaceli, coinciden en que no reciben la señal de televisión de Soria, sino de Aragón o Castilla La Mancha y en algunas de ellas, la gente se siente más vinculada a Aragón que a Soria. Como muestra, cuatro botones: Santa María de Huerta, Iruecha, Barahona y Monteagudo de las Vicarías.
Monteagudo de las Vicarías (a tres kilómetros de la provincia de Zaragoza): Carlos González, concejal de Monteagudo y propietario de un establecimiento de turismo rural habla claro: “Los de Monteagudo hacemos nuestras compras en Ariza, que está solamente a nueve kilómetros y en Calatayud y a veces vamos al mercado de los martes en Almazán. Los jóvenes se divierten en Arcos de Jalón y Calatayud y en cuanto a televisión, de Soria no llega nada, ni la sexta ni la TDT de la que tanto se habla. Lo que vemos nos llega a través de Zaragoza. Nos sentimos sorianos, pero estamos abandonados de la mano de Dios, por no decir de las administraciones sorianas. Turísticamente se nos ha dejado fuera de la ruta del Cid y se nos amenaza con una vía de circunvalación, con la que acabarán de rematar al pueblo”.
SANTA MARÍA DE HUERTA
Santa María de Huerta (a dos kilómetros de la provincia de Zaragoza): Para la gente de Santa María de Huerta, su capital es Zaragoza, de la que dista 120 kilómetros por autovía, mientras que Soria está a 105 kilómetros, 75 de ellos por carretera nacional. Así lo opinan algunas de las personas consultadas por HERALDO, que coinciden con, Inma, propietaria de un pequeño supermercado en el que se vende casi de todo, incluso tabaco: “Lo traspaso, porque la gente se va a comprar a Ariza, Calatayud y Zaragoza, que es nuestra capital y nos sentimos más zaragozanos que sorianos. Solamente para el ocio y la diversión los más jóvenes se van a Arcos de Jalón. La televisión la vemos por Aragón, aquí ni Soriavisión ni nada de nada”.
IRUECHA
Iruecha (a dos kilómetros de la provincia de Guadalajara y a seis de la de Zaragoza): A pesar de ser la más “rayana” de las localidades de la comarca de Medinaceli, hasta el punto de que a sus habitantes se les llama “rayanos”, sus gentes se sienten muy sorianas y su lugar de compras y diversión es Arcos de Jalón, de la que Iruecha es pedanía. La señora Feli así lo expresa: “ En Arcos de Jalón está nuestro Ayuntamiento y allí vamos a hacer gestiones y a comprar. También vamos a Almazán y Soria, porque aunque estamos cerca de las provincias de Guadalajara y Zaragoza, en los pueblos cercanos, como Maranchón, no hay muchas cosas. Somos muy sorianos, aunque la televisión la vemos por Aragón y también me gusta ver los programas de la televisión autonómica de Castilla-La Mancha.
Para María Ángeles Bartolomé la relación con Guadalajara y Zaragoza es muy señalada. “Aquí hay un revoltillo. El prefijo telefónico lo tenemos de Guadalajara, la luz también, el cura viene de Alconchel (Zaragoza) y el cartero, viene de Santa María y reparte también a Alconchel, que lleva el prefijo de Soria”. “También se nos pega un poco el acento de Zaragoza y los cánticos que tenemos son al estilo de Aragón, de Soria no hemos sacado nada”. Comenta María Ángeles que Calatayud, en Zaragoza y Maranchón, en Guadalajara son dos puntos de referencia. “Este año tuvieron que operar a una cuñada mía de apéndice y la llevaron a Calatayud porque está mas cerca; los vecinos se van a hacer compras a Calatayud y a Codes, que es de Guadalajara íbamos antes a cada paso cuando no había misa aquí”.
BARAHONA
Baharona (a cinco kilómetros de la provincia de Guadalajara): En Barahona no tienen ninguna duda, como nos explican desde el Ayuntamiento: “Somos totalmente sorianos y nuestros pasos se dirigen, sobre todo a Almazán, para grandes compras, gestiones de todo tipo y diversión; también vamos a Soria con frecuencia. Lo cual no significa que no haya una excelente relación con los pueblos vecinos de Guadajalara, como Atienza, pero es que también es un pueblo pequeño. Quienes más se relaciones con los vecinos alcarreños son los agricultores y ganaderos, que se llevan estupendamente. Hay gente va con frecuencia a Atienza y Sigüenza, pero nuestras capitales son Almazán y Soria. Los canales nacionales los vemos por Soria, aunque es lástima que aún no nos ha llegado aún la TDT, Algunas personas suelen ver algunos programas de la televisión de Castilla-La Mancha, que se ve bien aquí”.
CASTILLEJO DE ROBLEDO
Al oeste de la provincia, Castillejo de Robledo, se encuentra a 100 kilometros y a una hora y media de viaje de la capital y a 26 kilómetros de Aranda de Duero y a escaso 10 del límite provincial. Una vecina de Castillejo no tiene ninguna duda de a dónde pertenece: “Somos de Soria, pero nos movemos más hacia Aranda Duero para las compras, a Soria vamos muy poco porque pilla muy lejos”.
Antonio García, un madrileño que lleva muy poco tiempo en Castillejo advierte de que “al no ser nacido aquí no tengo mucha conciencia de pertenencia, pero la compra la hago en Aranda de Duero, mi banco lo tengo en Caja Rural de Burgos y sin embargo digo que estoy viviendo en Soria”.
“Realmente Aranda es el centro de esta zona, aquí tengo también la opción de San Esteban y Burgo de Osma pero Aranda tiene más supermercados y el servicio de autobuses es mejor, está mejor comunicado que con Soria. A la capital no voy si no es por turismo, señala.
Otra vecina de Castillejo se queja de que “cada vez que tengo que ir al médico a Soria tardamos una hora y tres cuartos, a Aranda es media hora, cada vez estamos peor asistidos”.
ESPEJÓN
En Espejón, a 73 kilometros, (una hora y 14 minutos) de Soria, la distancia con el primer pueblo burgalés, Navas del Pinar, son ocho kilómetros. “Con los pueblos de Burgos tenemos mucha relación, a Huerta del Rey vamos los lunes al mercadillo y algunas noches salimos a cenar. El carnicero de Huerta viene dos días a la semana. Los niños de Navas del Pinar vienen aquí al colegio. Y el pescadero nos trae el pescado de Hontoria. Cuando hay fiestas recorremos todos los pueblos. A Soria vamos para ir al médico, aunque la gente joven va tirando más hacia Burgos para hacer compras y para salir”, cuenta Nieves Solana, una vecina de Espejón.
ÁGREDA
Para los pueblos del Moncayo, Tarazona, a 20 kilómetros, ha sido siempre una ciudad de referencia al otro lado de la ‘raya’. “En Ágreda es normal que un fin de semana mucha gente joven se vaya a Tarazona a tomar unas copas, de compras, a visitar la ciudad o que durante la semana todos los días, los agredeños vayan al dentista, a la peluquería, a comprar o que en las fiestas de Tarazona se encuentren agredeños por todas partes”, explica una vecina. “Tarazona es una ‘segunda casa’ para Ágreda. Tiene 10.000 habitantes y una actividad comercial que sólo se encuentra en pueblos como Tudela. Soria queda más lejos, aunque también va mucha gente”.
Las costumbres también tienen influencia aragonesa:“En Ágreda siempre ha gustado más la jota aragonesa, si en fiestas no viene un grupo maño o navarro, no hay nada que hacer; el acento dicen que es maño y el prefijo, el 976, además de en Ágreda está en toda la comarca: Ólvega, Borobia, Muro, La Cueva...”, señala.
“Sabemos que somos de Soria pero Aragón nos tira mucho, la mayoría de los estudiantes se van a Zaragoza y muchos se quedan a vivir”, explica esta vecina. “Compartimos con Aragón algo muy importante: el Moncayo y el agua, que nace en Soria y se marcha hacia el Ebro, de ahí el dicho “Moncayo traidor, que manas en Castilla y riegas Aragón”. Además, muchos agricultores de Ágreda tienen tierras en Aragón, de donde suele recoger frutas y verduras más tempranas, por el clima”.
“La proximidad geográfica, en fin marca todo. La liga de fútbol se disputa en Aragón, porque estamos mucho más cerca. Ahora tenemos también convenios sanitarios, lo cual es bastante lógico”, añade.
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