Evidentemente a mi tampoco me parece un deporte, los que corren son los animales. Pero si, es una actividad espectacular, muy vistosa, y probablemente la menos agresiva en cuento a las que acaban con la muerte de un animal. Es una lucha bastante pareja, algo que se da a diario en cualquier monte de Castilla, la supervivencia. Nunca la practiqué, ni he tenido galgos, pero alguna vez lo vi y me pareció interesante, mucho más que aquella en la que se revienta a una liebre con un cartucho de perdigones.
Completamente de acuerdo. Es un perro contra una liebre. El cazador únicamente cobra la pieza, no interviene en su captura. En cualquier caso, para gustos, colores. Lo que sí es cierto es que la actividad cinegética (regulada, eso sí) es imprescindible en el medio rural de cara al control de las poblaciones de animales. Ha de tener una fuerte regulación, y ya la tiene, pero por lo demás es necesaria. Hablo por lo que conozco en mi pueblo, y sobre todo en el Señorío de Molina, donde he estado cazando hace algunos años. Me desencanté de la caza hace mucho (en realidad me inicié, como todo el mundo, por instigación paterna) y hace muchos años que no la practico, en cualquier caso, quizá llegue el día en que me vuelva a animar, aunque lo dudo mucho.
En el caso de la caza mayor, no le veo ningún producto a tirarte toda una mañana pasmado de frío al relente del rocío en la ladera sombría de un monte sin mover un músculo "a ver si pasa algo". La caza menor es mucho más activa y entretenida.
Aún así, prefiero dar un paseo por el campo "porque sí", sin finalidad alguna. Se disfruta mucho del ambiente.

P.S.: Os traslado una reflexión: si la caza no estuviera regulada, ocurriría como en el narcotráfico y otras actividades: todos los cazadores pasarían al mercado negro, y serían furtivos (y tú a un cazador no le puedes quitar la caza, lo lleva en la sangre, seguirá cazando lo permita la Ley o no). Por tanto, si no queremos crear un gigantesco mercado negro de piezas de caza, lo mejor es lo actual, permitirlo en vedas que permitan a las poblaciones recuperarse y mantenerse en un número aceptable. Es significativo que la caza a veces "invierte" el proceso y regenera poblaciones, como ha ocurrido en mi pueblo, por ejemplo, con la suelta de perdices periódica. Obviamente, los cazadores matan un 30% de las que sueltan, pero el resto quedan en el campo, y las que se adaptan a las nuevas condiciones sirven para regenerar la población.

