Bueno panadero creo que vamos acercando posiciones.
No estoy de acuerdo en tu concepto del nacionalismo. El nacionalismo no tiene porque basarse en la oposición a un enemigo, real o imaginario, sino que puede entenderse como la defensa de lo que se considera tu nación. Yo al menos, lo entiendo así, para mí los modelos de Arana, Castelao y ... no son válidos, o mejor dicho, los de PNV,BNG y ERC/CiU. Creo que un modelo del que podría aprender el castellanismo es el de la chunta. Defiende a Aragón sin necesidad de un enemigo que es el culpable de todos los males. Además el sentimiento español de Castilla es muy similar al de Aragón.
Inevitablemente al defender Castilla surgirán tensiones con Cataluña por ejemplo. Porque el pastel es único y si unos cogen más otros cogen menos, pero para eso no es necesario satanizar a nadie. Por cierto entrelíneas me ha parecido leer que crees que ser nacionalista implica ser independentista y no es así, se puede ser nacionalista sin ser independentista. Creo que en el caso de Castilla el nacionalismo no es una opción es más una necesidad dada la situación en la que nos encontramos.
Saludos desde Madrid (Castilla)
P.S.: Por la duda de si Madrid es o no Castilla
Hola de nuevo.
Más que un concepto de nacionalismo lo que intentaba explicar es por que unos nacionalismos prenden con más facilidad que otros y por que el discurso de unos no vale para otros.
Ciertamente no es necesario tener un enemigo para ser nacionalista, del mismo modo que uno puede perfectamente ser independentista sin ser nacionalista o nacionalista sin ser independentista.
Pero el nacionalismo dificilmente cala en la población si no es por oposición a un enemigo común. No diefiendo que sea necesario buscarse enemigos para ser nacionalista, lo que digo es que la popularidad del nacionalismo se basa precisamente en su carácter de ideología aglutinante frente a un enemigo de tu identidad nacional.
Obviamente el modelo de la Chunta es más razonable para Castilla que cualquier otro pero ¿Es posible trasladarlo?
La Chunta se desenvuelve en un entorno algo diferente, Aragón es un territorio más reducido que Castilla, más homogeneo y con una territorialidad menos discutida, además de encontarse polñiticamente unido.
Castilla es más amplia, más heterogenea, carga con el lastre de León y además aparece dividida en entidades que a veces manifiestan intereses contrapuestos. Hacer política en Castilla hoy en día equivale a hacer políticas diferentes en cinco autonomías diferentes.
Castilla debe encontrar su modelo, pero para definir un modelo la primera estrategia razonable pasa por ganar votos al precio que sea, y la vía más rápida pasar por buscar un enemigo "nacional"
El Castellanismo se me representa como un movimiento excesivamente intelectual en cuanto a su definición electoral. Que un partido como TC que lleva años en esto no llegue a los 9000 votos en unas elecciones generales (1021 en Castilla-La Mancha; y sin implantación en Cantabria o La Rioja) viene a manifestar la imposibilidad de convertir en votos una idea general de defensa de Castilla y lo castellano.
Para defender la agricultura, el agua o el patrimonio cultural los castellanos se vuelven hacia el PSOE o el PP El castellano medio no ve en TC algo que los demás no puedan ofrecerle por esa vía: si el trigo está barato con el PP votarán al PSOE y los que duden optarán por el voto útil y nunca lo harán por TC.
Un nacionalista catalán lo tiene muy fácil: la culpa es de España/Castilla, votar PP o PSOE es votar España, luego vota nacionalista. Y se quedan tan anchos.
Al castellano medio, por razones que ya he comentado no le puedes ofrecer en bandeja la cabeza de España ni mostrarles al PSOE o al PP como enemigos interiores a los que oponerse. El castellano medio carece del estímulo necesario para votar nacionalista pues no tienen un enemigo interior al que oponerse.
Aragón es similar a Castilla pero solo hasta cierto punto: en Aragón existe una base regionalista suficientemente fuerte como para servir de puente hacia el nacionalismo, y tienen elementos culturales suficientes como para remedar la épica del nacionalismo: la Corona de aragón, el Reino de Aragón, la Fabla Aragonesa...
¿Que puede ofecer TC al votante medio salvo la incertidumbre de un nacionalismo que el castellano medio asocia a ERC, PNV, impuestos revolucionarios y bombas en Madrid? El castellano medio no piensa en CHA
El discurso de la defensa de Castilla no vale: en Castilla se vota con sentido práctico, esto es a macropartidos y a la hora de la demagogía todos están prestos, fijate en el tema del Archivo de la Guerra Civil.
La encrucijada elctoral pasa por definir un camino: los partidos son hoy en día productos que se venden ¿Como se vende el castellanismo?
Tal vez el camino pase por ir poco a poco ampliando la implantación teritorial, sin pensar en los votos totales pero intentando arranzar poco a poco cuotas de poder municipal ¿Que se está haciendo al respecto?
Lo que sí es evidente es que hay que ir paso a paso: no se puede implantar una ideología nacionalista, pedir la unidad de Castilla, cuestionar la territorialidad de otras autonomias y plantearse la segregación de León todo a la vez. Tal vez el discurso elctoral de TC fuera más digerible para el castellano medio si fuera progresivo en lugar de poner en jaque todos los esquemas mentales del votante castellano a la vez.