Si Rioduero, la historia es como es, y permanece en los libros además de en las memorias, pero mantener en pie un símbolo como el valle de los caidos que no hace sino ensalzar y venerar un regimen fascista, autoritario y golpista me parece muy desacertado. En cualquier caso, si ha de seguir en pie, podríamos cambiarle el nombre, más bien ponerle dos nombres. Uno sería el de valle de nuestros caidos, para aquellos dignos defensores de un gobierno ganado por las armas, desautorizado por los derechos humanos, para aquellos heroes por dios y por españa. El segundo nombre debería ser, valle de sus caidos, en honor de aquellos perdedores de tan injusta guerra, para aquellas hordas rojas, saqueadores de iglesias y violadores de novicias. Estos, tan sólo tuvieron el "honor" de levantar aquel suntuoso edificio para la mayor gloria de los salvadores de la patria. Si lo viesemos así, tal vez no tardaría en llegar el día en que se decidiese el derrumbe de semejante homenaje al fascismo.

