Miranda. Sergio Castro, de 18 años, tiene un futuro prometedor
El bailarín mirandés Sergio Castro se forma ya con la Ópera de París
Se trata del único extranjero en una de las escuelas con más prestigio en Europa Le admitieron tras una audición privada
Poco a poco está consiguiendo los objetivos que se había marcado. Sergio Castro tiene un físico privilegiado para el ballet y, aunque empezó tarde en este mundillo, lo ha hecho pisando muy fuerte. Después de destacar en Miranda y su entorno, no dudó un instante en hacer las maletas para formar parte de la escuela de Mónaco.
Allí obtuvo unas calificaciones espectaculares e incluso la más alta en alguna materia. Pero su gran evolución y sus aptitudes no han pasado por alto en ninguna de las grandes escuelas europeas y hace sólo unas semanas ha ingresado en una de las más prestigiosas, la Ópera de París.
«Fui a Madrid a pedir una beca de estudios y, después de verme, me preguntaron que si no me interesaría ir a la Ópera de París. Me hicieron una audición privada y de momento estaré hasta Navidad», explica el bailarín.
Dos plazas
Se trata del único extranjero con el que cuenta esta institución, que en el mes de diciembre deberá decidir si Castro continúa en sus filas por, al menos, un año más. Continuar en Francia significaría acabar el último año de formación y optar a una de las dos plazas que oferta la compañía. Todo un reto.
Pero en el camino no se va a encontrar con muchos amigos, más bien al contrario. «El ambiente es mucho más competitivo que en Mónaco porque hay 16 bailarines y 14 van fuera. La gente aquí no está para hacer amistades cuando lleva desde los 8 años metida. Te ven como otro obstáculo que deben superar».
Por ello, de momento, sólo se plantea seguir trabajando y aprender lo máximo posible «y si luego consigo algo más, mucho mejor». En el caso de que no continuara, iría a Madrid, donde ya tiene una plaza fija. «Si bailas bien en España, bailas bien en todos los sitios», recuerda.
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