Siempre que se habla del trasvase me gusta mirar el mapa de la Península. Me resulta curioso que salvo el Ebro, el Júcar y el Segura en sus cabezeras, el resto de ríos, arroyuelos y arroyos desembocan sus aguas en el Atlántico.
Siempre me resulta curioso cómo los paises y regiones europeas se articulan en torno a sus rios y sus cuencas. Sin embargo Castilla es diferente. Siendo una tierra de meseta interior seca, cuyos rios van al Atlántico, nos marcan siempre los políticos iletrados el sendero hacia el mediterráneo. Nuestro agua (cuenca del Tajo) se va a un mar en contra de gradientes naturales, a través de obras faraónicas que no reportan beneficio ninguno a los habitantes de las cuencas y si a los bolsillos de gentuza sin escrúpulos. Pero lo mejor de todo es que a todo castellano le parece bien, no sea que cuando esté de vacaciones no haya agua para bañar al perrito
Y encima queda Portugal que ni se la oye ni nadie nos dice que piensan ellos de que el Tajo llegue hasta Lisboa echo una cloaca. Curiosa esta sociedad que desprecia tanto a Portugal y luego se vuelca como locos a limpiar chapapote.
Por eso me gusta mirar el mapa de la Península Ibérica y después acordarme de los Reyes Católicos, que fue una pena que un en milagro maravilloso de dimensiones bíblicas explicable sólo a su catolicismo, que a su paso por la cuidad de Toledo una gran riada les hubiese llevado camino de Lisboa, con un cartelito de Polaris World metido por el...............