Por tu frase, entiendo que salías a las seis de la mañana con la hoz, que te tirabas a la sombra de un carro de varas a comer un trozo de tocino con pan, y que seguias con la hoz hasta la medianoche. Eso existió, naturalmente, pero eso lo hacían mis abuelos. Hoy los agriculturos, al menos los de secano, los que no tienen que preocuparse o alegrarse por tener en sus tierras regadio, trabajan exactamente poco más de veinte días al año.
Obviamente, ir a cosechar hoy en día no es como hacerlo hace 60 años. Pero son entre 16 y 18 horas diarias, durante unos 20 días aproximadamente, si labras mucha tierra, como es el caso de mi familia. Por tanto, lo de que trabajan 20 días al año, en fin...
Durante los meses de Septiembre y Octubre tienes la siembra, y eso es trabajo diario como cualquiera. Amén de cuando se rompen palas o aperos y hay que cambiarlas (a mano), te hacen perder días que sí trabajas pero no produces.
Después viene el arado de toda la tierra que el verano anterior se cosechó, y junto al arado viene el rulado en los meses de Noviembre-primeros de Diciembre, hasta que entran las aguas y ya no se puede hacer nada.
En Diciembre-Enero son los únicos meses que no se hace gran cosa, precisamente porque al estar la tierra encharcada en buena parte es imposible entrar con maquinaria.
Durante la primavera se vuelve a arar todo por 2ª vez, lo que se llama el descostrado, para que la tierra de barbecho respire. Esto se hace con vertedera para romper la costra superior que han producido las aguas del invierno.
En Marzo-Abril además está el curado, que se hace con cubas de agua y productos contra las plagas y las malas hierbas.
Mayo suele ser un mes de mantenimiento y preparación para la siega: se saca la cosechadora, se cambian partes, se modifican otras, se reparan averías del año anterior. También se preparan los remolques, se les sueldan planchas de refuerzo... se adecenta un poco todo, vamos.
En Julio es el mes de la cosecha, y como he dicho arriba, las jornadas son de muchas horas.
Agosto es un mes de fiesta, digámoslo así. En él puede empezar a adelantarse trabajo, o tomarlo de vacaciones.
En definitiva, de los 12 meses que tiene el año, hay 3 (Diciembre, Enero y Agosto) que son en los que menos se hace. Pero en los otros 9 se trabaja, sea en una cosa o en otra. Ah, y por supuesto ese trabajo incluye sábados y domingos, faltaría más.
Por tanto, sí, libras 3 meses al año, pero los otros 9 que trabajas lo haces como un burro. El campo es un trabajo esclavo.
con roturar la tierra durante unos días, sembrar y luego cosechar, con máquinas con aire acondicionado, por cierto, ya lo tienen todo hecho.
En fin. No conoces el sector. Estás hablando sin saber, y me remito a lo escrito arriba. En la cosechadora de mi familia no hay aire acondicionado, y mi padre está en la cabina a 40º todos los años. Hay cosas que con los años se rompen y no puedes hacer mucho por ellas, porque una cosechadora es tan compleja que para arreglar el aire (llegar hasta los tubos de enfrío) hay que desmontar ejes, poleas y demás, lo cual la obra es tremenda (y costosísima económicamente), lo cual no sale rentable para (en esto sí), cosechar 20 días al año.
En mi pueblo hay gente que hasta el año pasado estaba cosechando sin aire acondicionado. Las máquinas nuevas van perfectas, pero no todo el mundo puede gastarse millones de pesetas en una cosechadora de última generación.
Que hay agricultores más esforzados está también claro, que se preocupan por buscar nuevos productos, que trabajan sus tierras y las de los demás. Pero no son todos.
Obviamente, esto es como los empresarios: los habrá que inviertan en I+D+i y los que se conformen con su actividad de toda la vida. Y también depende mucho de como esté la tierra y en qué zona geográfica tengas la tierra (valle, sierra, páramo, vega...).
En cualquier caso como ya dije, es un secto que hay que proteger, potenciar y defender. Es la base de un estado de bienestar, y se merecen más reconocimiento y respeto del que tienen. Los precios que sufren desde hace décadas son insultantes, y sus beneficios muchas veces son más que ridículos.
Estoy muy de acuerdo con este último párrafo.

