Joder, cómo le gusta al marujón este que deje mi huella siempre. Tengo ganas de conocerte en persona, Rioduero, a ver si un día de estos vuelvo a Zamora. O te pasas por mi pueblo, para que veas lo "peculiares" que somos por allí.
Bueno, pues en vistas de que sin mí esto se aburre, me voy a arrancar:
Cuando me parió mi madre
acababa de nacer
y a los quince días justos
ya tenía medio mes.
¿Te has quedado agusto?