Hay constancia de que en el territorio de Cabezón hubo asentamientos vacceos. Se trata de un pueblo que llegó al valle medio del Duero antes de que lo hicieran los romanos. Después, vivirían bajo la dominación romana hasta la conquista de los godos.
Los vacceos fueron hábiles granjeros que se dedicaban principalmente al cultivo de cereal y a la ganadería ovina. También se sabe que era un pueblo guerrero que opuso gran resistencia a los romanos.
Veneraban a tres Dioses. Lug, asociado con el sol, era el Dios del comercio y de los artesanos. Con motivo de la culminación de las cosechas en el mes de agosto, los vacceos celebraban una ceremonia de marcado carácter agrario a la que llamaban Asamblea de Lug o Lughnasadh.
La población de Cabezón de Pisuerga rememora su pasado celebrando anualmente desde el año 2.002 la denominada Fiesta Vaccea de Lughnasadh el día 15 de agosto. Esta fiesta pone de manifiesto las dos características del pueblo vacceo: la agricultura y la artesanía como su medio de vida y el constante enfrentamiento a los romanos.
Este 14 de agosto volverá a celebrarse en Cabezón de Pisuerga. No creo que los vacceos tuvieran entre sus divinidades a Lug ni que celebrasen Lughnasadh, aunque si alguna equivalente. En cualquier caso, una celebración interesante y relacionada con nuestra historia al margen de las monótonas celebraciones religiosas.