Que en pleno siglo XXI, un beso, una muestra de cariño tengan que regularse mediante procedimientos administrativos, judiciales y legislativos, lo dice todo sobre el ser humano. En fin, buena noticia, y a la vez, triste, lamentable.
Y en Colombia pueden darse con un canto, porque en Iran un beso o muestra de cariño en público puede suponer la muerte a los homosexuales.