http://www.periodistillas.com/2013/12/como-llevar-la-ruina-un-espacio-joven.html?showComment=1386424529280#c3212159289567024819CÓMO LLEVAR A LA RUINA UN ESPACIO JOVEN
Javier Burón/ @buronejo
El Ayuntamiento de Palencia tiene todas las respuestas. El Espacio Joven fue en su día uno de los proyectos con mejor resultado de la administración de Heliodoro Gallego, y por no decir que una de las pocas cosas que se recuerdan de la Concejalía de Juventud. Ese lugar situado junto a Acup y el Tello Téllez era el único lugar público al que la gente joven podía acudir a entretenerse y formarse a un coste mucho más reducido del real.
Desde cursos de guitarra, bajo, batería o producción musical, hasta excursiones a parques temáticos, a lugares culturales como Atapuerca, programas de televisión como El Hormiguero o actividades en la naturaleza como puenting y rafting. Lugar donde muchas bandas musicales de chavales de Palencia podían empezar sin tener que invertir mucho en un buen equipo y sin molestar a los vecinos. Conciertos y espectáculos en verano. Sala de ordenadores, de playstation, de juegos. Y, aunque se podía mejorar, como en todo, el Espacio Joven era un poco el paradigma de lo que tiene que ser un servicio público para la juventud, con una oferta constante, interesante y económica.
El caso es que comenzó en 2006 como proyecto estrella de la Concejalía de Juventud del Ayuntamiento socialista de Gallego, que siguió manteniendo las partidas de forma más o menos regular. Esto fue hasta 2011, tras las elecciones municipales de mayo de 2011, cuando Alfonso Polanco ganó la alcaldía con el Partido Popular. No voy a decir aun que fue el Partido Popular o fue la crisis la que se lo cargó, si bien es cierto que el ayuntamiento de Alfonso Polanco tardó apenas tres meses en comenzar el cambio irreversible que sufriría el Espacio Joven.
En septiembre de ese año, el Ayuntamiento comenzó a negociar con los gestores y se dio un ultimátum. O se destinaba la mitad del dinero o se privatizaba, debido a que no se podían asumir los costes. Es decir, se iban a entregar un máximo de 35.000 euros, y lo que se iba a ahorrar eran 33.000 euros. Finalmente no se llegó al acuerdo, se despidió a los dos trabajadores y se llegó a la decisión de que se entregaría la gestión al grupo Scout Tres Mares. Esto ocurrió por ahorrar 33.000 euros. El concejal de Izquierda Unida, Juan Gascón dijo que todo fue por "30.000 euros, que son menos de dos conciertos de Bertín Osborne(17.000€), menos de dos veces lo que el Ayuntamiento se gasta en el bautizo en la nieve de los escolares(18.900€) y bastante menos de lo que costó la estatua de Marta Domínguez(51.000€), por poner tres ejemplos de gastos que me parecen innecesarios".
El grupo Scout Tres Mares duró hasta febrero de 2012, cuando decidieron dejar el Espacio Joven después de que los dos antiguos trabajadores demandaran al Ayuntamiento por despido improcedente. "En el supuesto de que esta demanda prosperara, las indemnizaciones serían superiores a dicho importe (a los 35.000 euros destinados)" por lo que decidieron desentenderse. Así, el centro estuvo cerrado hasta abril, que regresó no como Espacio Joven, sino como Escuela de Ocio y Tiempo Libre y Punto de Información Juvenil, funciones que ya se venían haciendo en la Concejalía de Juventud.
Al mes siguiente hubo una manifestación a favor del Espacio Joven tal y como era antes de la desastrosa gestión. Pero tal fue el punto del gafe, la mala leche, el chapucismo reinante en ese edificio desde que empezó el culebrón que pocos días después fue desvalijado. Unos ladrones, aun desconocidos, entraron, robaron todos los materiales tecnológicos, desde amplificadores a videoconsolas. Además, destrozaron puertas, ventanas y muebles. Unos cuantos miles de euros. Eso parecía la puntilla final.
Finalmente en septiembre de 2012, cuando llevaba prácticamente todo el año cerrado, salvo las ocasiones puntuales que fracasaron, volvió a abrir, suponiendo un desembolso bastante mayor del que se quiso evitar justo un año anterior, eso sí, cambiando definitivamente el nombre y la forma de funcionamiento del lugar, que se ha quedado con lo de Centro de Información Juvenil y Escuela Municipal de Tiempo Libre.
Al ver la historia se le revolvieron las tripas a más de uno, porque quedó demostrado que el Ayuntamiento de Palencia no conoce la máxima de "lo que funciona es mejor no tocarlo". Por el dinero no fue, porque se ha invertido más en cosas banales e innecesarias. Al final, la única conclusión que se saca es política, y es que parece que no sentaba bien al alcalde que unos "perroflautas" estuvieran ahí haciendo el vago. Por eso se repensó, se reestructuró el proyecto que acabó totalmente destruido, con un culebrón innecesario, llevándose tiempo y dinero del contribuyente para ir solo a peor: sin dinero y sin servicios.

