Escocia e Inglaterra son dos naciones terriblemente maduras y asentadas, en una democracia a años luz de la que se tiene en esta Península.
No sé si alguien puede buscar un paralelismo entre lo que pueda surgir en el Reino Unido y que se pudiese transladar a España, sobre todo con vascuences, catalanes y gallegos. Pero es que no puede existir porque lamentablemente nuestros "vecinos" carecen de ese saber estar de los escoceses, de su seriedad, de su madured. Ya me gustaría que los castellanos tuviesemos vecinos, tan naturales y tan razonables como lo es Escocia. No es lo mismo hablar con chiquillos mal criados que hacerlo con hombres.
Respecto a Inglaterra, pues seguro que tienen millones de problemas más serios en los que pensar. Y los ingleses, no lo olvidemos, son ante todo prácticos.