Bueno, más vale tarde que nunca.
La ribera del río constituye un ecosistema, que evidentemente se verá perjudicado. Mas si se construyera en otro lado, también se produciría afección al medio ambiente. Se construya donde se construya, el impacto ambiental es inevitable. La clave es el desarrollo con cabeza, intentando minimizar los efectos, lo que se llama desarrollo sostenible. En conclusión, habría que ver el proyecto, aunque la iniciativa me parece, a priori, buena.
Si en el fondo me parece bien. Pero me da rabia que aquí acabemos de caer del guindo y nos demos cuenta a estas alturas que lo que hace falta es darle a la gente una oportunidad en su tierra para que se quede, nada más.
En cuanto a lo que si está o no a la orilla del río... pues pienso que está mejor junto a un cauce, que atempera el clima y hace bonito (no como Valdeluz, en el páramo del Sotillo junto a guadalajara donde jamás hubo poblamiento humano alguno). Lo malo de eso es que los mejores lugares suelen estar ya cogidos y es posible que haya riesgos de crecidas. Ampliar una localidad ya existente habría sido mejor opción.