En 1986 el PSOE ganó en escaños (19 por 17 del PNV) por el peculiar sistema electoral vasco que otorga el mismo número diputados a cada territorio, pero el partido más votado fue el PNV (270.000 votos frente a 250.000 del PSOE).
Al final, el PSOE no pudo gobernar porque no encontró aliados que le dieran la mayoría necesaria para gobernar (sólo tenía el apoyo de los 9 escaños de EE), así que no le quedó más remedio que hacer lo que hizo. Lo demás son mitos.