Muere una mujer atropellada en la acera por un coche de la Guardia CivilUn Renault Laguna camuflado de la Guardia Civil arrolló la tarde del sábado a María del Carmen Moreno González, que acababa de cumplir 84 años el pasado jueves. La mujer, que circulaba por la acera camino de la parada del autobús, fue atropellada por el vehículo policial, en el que iban tres agentes y un detenido acusado de pertenecer a la organización Segi, vinculada a ETA. Un portavoz del instituto armado aseguró que el coche iba con una luz azul y con la sirena puesta y que esquivó a un vehículo que le salió al paso, lo que le obligó a subirse a la acera. La familia discrepa de esta versión oficial y mantiene que los guardias
intentaron marcharse a toda velocidad del lugar tras cambiar las placas del coche.
http://www.elpais.com/articulo/madrid/Muere/mujer/atropellada/acera/coche/Guardia/Civil/elpepuespmad/20091130elpmad_5/TesCondena al bombero que causó la muerte de una mujer en un choqueEduardo Veiga llevaba a sus padres de vuelta a casa después de comer en un restaurante de General Pardiñas. Celebraban que Teodoro, el padre, cumplía 89 años. Eduardo condujo por Alcalá hasta el puente de Ventas. Iba a tomar la M-30 norte, así que hizo la raqueta y se paró en el semáforo. Al ponerse verde, arrancó. El camión de bomberos, que bajaba desde la plaza de Manuel Becerra, les embistió.
Antes de chocar con el Volvo, el camión golpeó al coche que Eduardo tenía a su lado en el semáforo. El impacto causó lesiones leves a su ocupante, que ni siquiera fue hospitalizado. Pero al Volvo lo alcanzó de pleno. Eduardo acabó con 13 costillas rotas, seis vértebras aplastadas, una contusión pulmonar y 14 días ingresado en la Princesa. Las lesiones de su madre, Nieves, que iba sentada detrás de él, fueron tan graves que murió de madrugada en el Ramón y Cajal.
Alta velocidad
El juez cree que el camión de bomberos circulaba "a una alta velocidad". También considera probado que la sirena no funcionaba en el accidente, extremo que el Ayuntamiento negó entonces. El juez pudo contar con la información de un testigo "muy preciso" que vio perfectamente lo que sucedía en el puente de Ventas.
Que el camión de bomberos cruzó en rojo también queda probado, según la sentencia. El testigo así lo declaró y los bomberos no pudieron probar lo contrario. Los ocupantes porque no lo vieron y el conductor porque "sólo supone que estaba en verde, pero no lo miró inmediatamente antes de la colisión". El camión iba demasiado rápido. Y eso que el juez da por buena la velocidad de 70 kilómetros por hora por ser "la más favorable al conductor".
"Ni siquiera había huellas de frenada; no hizo nada para evitar la colisión", asegura Eduardo, que asistió a las dos sesiones de un juicio "largo y tenso". Veiga se da por satisfecho con la sentencia, aunque hubiera querido una condena más elevada, "ejemplarizante".
La conducta de J. G. M. implicó, según el fallo, "una omisión de los deberes sociales de prudencia en la que no habría incurrido una persona rigurosamente escrupulosa y precavida observadora de sus obligaciones".
El juez también condena al bombero a pagar 99.600 euros en indemnizaciones a los afectados, de las que tiene que responder la aseguradora, Zurich, y el Ayuntamiento de Madrid, de manera subsidiaria. El bombero sigue en su puesto. Una portavoz del Consistorio aseguró que la sentencia es recurrible y que "cuando sea firme se evaluará la decisión o posibles acciones que pueda tomar el Ayuntamiento".
http://www.elpais.com/articulo/madrid/Condena/bombero/causo/muerte/mujer/choque/elpepuespmad/20091130elpmad_4/TesLos tiempos medios de los servicios de emergencia en Madrid están en torno a los 8 minutos, pero hablamos de un incendio o de una emergencia sanitaria, no no de llevar a un detenido al Juez, ¿que pasó? nos retrasamos en las 72 horas iniciales de la detención y andabamos justos?
En el caso del bombero, fue una colisión por alcance, en el caso del GC una colisión por condución temeraria que al perder el control del vehículo acaba con una muer fallecida en la acera, lugar por donde están o deber de estar los peatones.

