10 empresas del titular de la Cámara de Comercio de León tributan en otras provinciasQue en el mundo de la empresa hay poco espacio para sentimentalismos es conocido. Sin embargo, algunos ejemplos resultan chocantes. Es el caso de uno de los principales empresarios mineros del país, a la sazón presidente de la Cámara de Comercio e Industria de León.
Manuel Lamelas Viloria es la cabeza visible de un imperio empresarial forjado desde el rico el subsuelo leonés y diversificado más tarde hacia la construcción o las renovables, entre otros.
Pero, el abanderado de los empresarios leoneses tiene sus domicilios fiscales más jugosos, los que se desprenden precisamente del negro mineral —el Grupo Viloria con Alto Bierzo y sus casi 2 millones de euros de capital social, al frente—, fuera de las fronteras de León.
En Madrid, concretamente. En la emblemática Gran Vía, junto al Museo de Chicote, para más señas, según consta en el Registro Mercantil madrileño. Es su enseña empresarial, la que le define como 'minero' y la génesis de buena parte de la fortuna familiar de los Viloria. Otras cuatro marcas del grupo también residen en la capital de España.
Viloria también cuenta con cargo o representación en empresas repartidas por media geografía española, desde La Coruña a Sevilla, pasando por Burgos, Zamora o Asturias. Cerca de una quincena más se quedan en León, claro.
Esta es una práctica habitual de esos empresarios que tantean terrenos esperando oportunidades fiscales o menor control tributario por parte de las autoridades, por tanto, no es ilegal ni mucho menos, pero sí resulta incoherente cuando el titular de estas sociedades es el presidente de la Cámara de León.
El mismo que desde el palacete de Padre Isla, sede de la entidad cameral, arenga día tras día en favor de la provincia, que reclama inversiones y esfuerzo empresarial, que pide ayudas a las administraciones locales y urge inversiones públicas para León.
En el caso de Viloria, además, ese papel institucional y político que desarrolla no ha sido un fruto de la casualidad, no es una situación sobrevenida, sino que en la actualidad cumple su tercer mandato consecutivo, por lo que el éxodo de sus empresas no es una circunstancia imponderable. Más bien un hecho inexcusable que, según apunta él mismo, no tendrá remedio ni a corto ni a largo plazo.
http://www.elmundo.es/elmundo/2010/08/01/castillayleon/1280653323.html