Alertas récord de impago en Grecia y Portugal, a pesar de sus rescateshttp://www.expansion.com/2011/04/14/mercados/1302768976.html?a=04eab8c71fea12cc0c504159601ca8ce&t=1302894590El temor a una reestructuración de la deuda griega sitúa sus seguros de impago (CDS) por encima de los 1.000 puntos. Los récords son extensibles a la deuda de Portugal. El interés exigido a su bono a diez años marca un nuevo máximo por encima del 9%.
La crisis en la deuda periférica abandona la tregua y sufre una nueva sacudida. La peor parte se la llevan Grecia, el primero de los países rescatados, y Portugal, el último en solicitar la ayuda europea.
Las mayores alertas se concentran en Grecia. Las últimas jornadas han relanzado el debate sobre una posible reestructuración de su deuda, lo que podría implicar posibles recortes o aplazamientos en los pagos.
Las alarmas se han disparado después de que el Gobierno alemán reconociera por primera vez que Atenas podría verse forzado a esta reestructuración. Así lo cree un 60% de los analistas consultados por Reuters, frente al 40% respecto a Irlanda y al 30% de Portugal.
Desde el propio BCE han advertido de sus efectos. El italiano Lorenzo Bini Smaghi advierte de que "reestructurar la deuda griega implicaría una serie de efectos que tendrían que ser valorados detenidamente. Entre ellos, que la ayuda financiera dada por otros miembros de la Unión Europea no sería reembolsada, lo que significa que los contribuyentes de esos países perderían miles de millones de euros".
Sin pistas sobre un eventual regreso de las compras de bonos por parte del BCE, los inversores vuelven a extremar la cautela, y este clima de máxima incertidumbre se refleja de lleno en el mercado de derivados. Los credit default swaps (CDS) de Grecia a cinco años se disparan por encima de la barrera de los 1.000 puntos básicos, hasta alcanzar un récord de 1.105 puntos, lo que supone que el coste de asegurar 10 millones de euros de deuda griega a cinco años se encarece hasta los 1,1 millones de euros.
Al igual que los CDS, el riesgo país supera los 1.000 puntos básicos (1.105, sus cotas más altas desde mayo de 2010). El mercado de deuda pública comparte cifras alarmantes. El interés exigido a los bonos griegos a dos años supera el 17,6%, a tres años sobrepasa el 18,8%, a cinco el 17,5% y a diez el 13,1%.
La deuda de Portugal no se libra tampoco de la huida en masa de los inversores, y entre sus efectos destaca el récord, desde la introducción del euro, que marca el interés de su bono a diez años, el 9,064%. Más elevada aún es la rentabilidad exigida a más corto plazo, a cinco años, por encima del 10,5%. La del tres años rompe también el nivel del 10%.
La deuda española no logra aplazar esta vez el efecto contagio. El riesgo país rozó el pasado martes mínimos del año, en 170 puntos básicos. Hoy, después también de los compromisos de inversión desmentidos por China, esta brecha se amplía hasta rozar los 200 puntos básicos
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