Titín, a la final por la puerta grandeCon un Merino II que se doctoró en el Ogueta, rompe la imbatibilidad de Olaizola II y Beroiz en un duelo estelarTINO REY
trey@elcorreo.com VITORIA.09/04/2012

Titín abraza a Merino, emocionado, al final del partido
Saltó la sorpresa ayer en el Ogueta de Vitoria, que rozó el lleno. Olaizola II y Beroiz, que transitaban por el Parejas como un ejército invasor, con quince victorias consecutivas, mordieron el polvo (20-22) ante Titín III y Merino II, que se salió del guión. El joven zaguero de Villar de Torre, con solamente 22 años, mató el partido con un zurdazo al ancho que rompió la muñeca del de Goizueta. El pelotazo llevaba trilita.
Otro importante hito en el currículo de Augusto Ibáñez Sacristán. A sus 43 años, ha entrado a lo grande en la final del Parejas y ha puesto en cuarentena las leyes de la longevidad. Ha superado el registro que tenía en su poder el mito Julián Retegui, que, con 42 años, se proclamó campeón del Cuatro y Medio. Pero el emperador de Tricio da la impresión de que ha frenado la marcha imparable de su DNI. Un día más demostró que conoce a la perfección todos los entresijos del juego, tanto en la faceta atacante como defensiva, y ha guiado, con mano sabia y firme, a lo más alto de la modalidad a un chaval que ya es el gran referente de los cuadros largos del frontón, Merino II.
Ambiente de gala el vivido ayer en el recinto de Mendizorroza. Y es que la pelota a mano profesional permite que los pelotazales, de todas edades y condiciones, se sientan alrededor del fulgor que emiten los pelotaris y se empapan de una pasión y emoción sin límites. Lo de ayer superó con creces todas las expectativas que había despertado en los días previos a lo que se tildó como una final anticipada.
Espectáculo grande. De esos que perduran en la retina de los amantes de este deporte. El respetable estuvo metido en la semifinal desde el mismo momento que el juez sorteó el primer saque, que correspondió al benjamín de los Olaizola. Y mantuvo la conexión con los gladiadores hasta que el último tanto subió al casillero del dueto riojano. La que no tuvo su tarde fue la cátedra. De salida, sin ponerse la pelota en juego, ofreció 100 a 40 euros a favor de la pareja navarra. Y cuando estos se pusieron al mando de los acontecimientos (11-15) devaluaron el dinero, 100 a 200 euros. «Alguno habrá abandonado Vitoria con un importante agujero en su cuenta corriente», afirmó un conocido corredor de apuestas. Y es que la vida pasa mientras los hombres hacen unos planes que no se suelen cumplir.
Inicio eléctrico
El duelo se inició eléctrico, explosivo. Saltaban chispas de la pelota. Tras el empate (1-1) se fueron hacia adelante, 5-2, los representantes de la promotora de los Vidarte. Hubo empates a 5, 7, 9 y 11, y la pelota, nunca mejor dicho, en el tejado. No había una pareja capaz de dominar la situación, para disfrute de la grada, que no se cansaba de aplaudir y animar a los suyos.
Los de Asegarce despegaron con fuerza (11-15) y dieron alas a las tesis del sanedrín bursátil. Los cofrades de los navarros murmuraban: «Este partido ya no se nos escapa». Pero con Titín III es prematuro adelantar acontecimientos. Se puso a un tanto de los escapados, 14-15, y temblaron los cimientos del Ogueta. Con un zurdazo al fondo de la cancha y una paradita al 'txoko', Aimar volvió a tomar oxígeno: 14-17.
Sin embargo, la tarde se adentró en la incertidumbre: 17-17, 18- 18 y 20-20. El delirio y la zozobra se instalaron en el corto de Mendizorroza. Al segundo de los Olaizola le llegó una pelota franca, armó su zurda, y marcó un gancho que fue a morir a la madera de la contracancha, 21-20. El misil de zurda al ancho que ejecutó el de Villar de Torre sirvió para finiquitar un partido histórico: 22-20.
Los riojanos se ganaron la final del Parejas con todos los honores. Han sido los mejores de esta liguilla de semifinales. Los otros acompañantes saldrán del enfrentamiento Xala y Laskurain contra Olaizola II y Beroiz, previsto para el viernes en el Bizkaia de Miribilla. El sábado, en Pamplona, Titín y Merino se ven la caras con Berasaluze VIII y Albisu, ya eliminados.

