Os pido disculpas a todos, antes de comenzar mi escrito.
Hace varias semanas que encontré vuestro foro y me sentí como en casa. Me ilusioné y participé en él, tal vez con demasiadas ganas. Escribí varios mensajes sobre esas cosas que todos llevamos dentro y debemos, de vez en cuando, soltar para que no nos envenenen. Denuncié la profanación de varias iglesias del norte de Burgos y reclamé la deuda histórica de Castilla.
Agradezco al moderador que retirase parte de mi primer escrito ya que, aunque es cierto lo que dije, no tengo otra prueba que mi palabra para demostrar lo que vi.
No es eso lo que quiero expresar en este mensaje que ahora escribo.
Yo quería expresar otra cosa. Y lo hago porque sé que sabréis diferenciar una cosa dicha con sinceridad, como ésta, de otra dicha con mala intención. He pecado de panoli cuando he pensado que en este foro iba a buscar respuesta a muchas de mis preguntas e iba a compartir muchas inquietudes.
Yo amo a Castilla desde que tengo recuerdos. No sé si amar a una tierra es sentirse parte de ella porque realmente yo me siento parte de esta tierra que piso. No tengo a nadie entre mis ascendientes que sea de fuera de Castilla, castellano 100%. Cuando viajo, noto el instante en que paso de Castilla a algún otro lugar. No es lo mismo, aunque vayas por autopista, el ambiente que te rodea en Castilla que el que te rodea, por ejemplo, en León (y pido disculpas a los muchos que incluís a León en la misma unidad que Castilla) Hay algo que nos hace distintos, aunque hermanos.
Decidí no escribir durante una temporada y leerme con mayor detenimiento los mensajes que habéis ido dejando posar en este foro. Y me he dado cuenta que todos somos castellanos, pero muchos vamos a nuestra bola. Lo llegué a decir en algún mensaje: primero se es castellano y, luego, se saca la ideología de izquierdas o de derechas o de lo que sea..... Pero la verdad fría es que no estamos unidos. compartimos muchas cosas, pero no hacemos piña. Ponemos muchas cosas históricas al final de los mensajes, pero creo que falta esa complicidad que hace que las cosas avancen hacia donde tienen que avanzar: hacia el futuro.
Se nota una división entre izquierdas y derechas que no puedo soportar más tiempo. Sinceramente creo que habría que buscarle una solución a esto. A mi no me importa que tu, que me lees ahora, seas de izquierdas o de derechas. A mi me importa que tu ames nuestra cultura y la defendamos. Eso es lo importante.
Unid fuerzas, por favor.
Hasta siempre y gracias por haberos leido todo este rollo que os he soltado. Un saludo.