Yo con lo que alucino es con la postura vasca reciente. Ahora que los catalanes, ¡por fin!, se han atrevido a dar el paso hacia el abismo, digo, hacia la independencia, van los vascos y se callan cual putas poligoneras. Parece como si pensasen: oye tú, tampoco es eso, como nos independicemos, ¿a quiénes vamos a succionar?, ¿sobre quién vamos a conservar privilegios? ¡no jodáis! Y es que el independentismo, ya lo dijo un diputado de CiU hace años, es negocio, pero la independencia es quiebra. Esto demostraría que los rudos vascos, han resultado ser más listos que los fenicios catalanes... por lo menos los de segunda generación.

