Nace la Academia de la lengua del Aragonés
Zaragoza.- El Aragonés cuenta desde este sábado con su propia Academia de la lengua con la que defender su independencia y su identidad. Ciento cinco votos de los participantes en el II Congreso de l’Aragonés han dado el sí a la creación de una entidad lingüística sin antecedentes en la Comunidad de Aragón. Aunque el voto ha sido mayoritariamente positivo tres históricos vinculados al Aragonés como son Francho Nagore, Chesús Inazio Nabarro y Chabier Tomás no estarán dentro de esta Academia por diferentes motivos. Aún así, la agrupación Chuntos por l’Aragonés se ha mostrado muy satisfecha por el logro en el que han estado trabajando durante 18 meses.
“La consecución de la Academia de l’Aragonés es la guinda del II Congreso que hemos estado realizando”. Así de rotundo se ha mostrado el presidente de Chuntos por l’Aragonés, Manuel Castán, segundos después de conocerse el resultado de la votación. En este caso, todos los asistentes han mostrado su consideración o desagrado con una lista cerrada propuesta por Chuntos en la que figuraban una serie de representantes evaluados por sus conocimientos lingüísticos y su vinculación al Aragonés. Una creación que no ha estado exenta de polémica y que ha obligado a tres de los históricos de este movimiento Nagore, Nabarro y Tomás, a no estar dentro de la Academia. A los dos primeros el proceso y el sistema no les ha convencido y el tercero ha alegado otros motivos.
Debate y votación
La última jornada del II Congreso se ha guardado para crear una de las herramientas más importantes, que a partir de este momento, va a tener el Aragonés, según los miembros de la organización. Un comité especializado y bajo un proceso consensuado por los distintos representantes implicados dentro de Chuntos por l’Aragonés, creaba hace unos meses una lista con diferentes candidatos a estar dentro de la Academia. Personas vinculadas al mundo del Aragonés desde hace mucho tiempo y conocedores de la lengua por sus vínculos patrimoniales o por sus estudios lingüísticos. En la jornada de hoy los asistentes han votado la lista propuesta, conjuntamente con la creación de la Academia, que ha salido adelante con los votos favorables de 105 congresistas, 23 negativos cinco en blanco y uno nulo.
Pero la jornada no ha estado exenta de debate o polémica. En la Academia de l’Aragonés estarán filólogos y otros que no lo son.
“Nuestra lengua es muy peculiar, siempre ha estado rota en mil pedazos y es muy importante que los que estemos representando a las variantes trabajemos por su desarrollo. La selección natural hará entrar a unos y salir a otros”, ha expresado el presidente de Chuntos por l’Aragonés, Manuel Castán. En esta ocasión tres personas muy importantes y vinculadas a la lengua desde hace años no van a estar dentro, según los congresistas. Francho Nagore y Chesús Inazio Nabarro han decidido no pertenecer a la Academia por el momento porque no están muy convencidos.
Antes de la votación los asistentes al congreso han podido expresar su parecer ante la creación de la nueva entidad gestora y los dos protagonistas, Nagore y Nabarro, han mostrado el por qué de su negativa. La gestión del proceso en los últimos meses y la lista cerrada propuesta desde la organización ha determinado que éstos dos históricos prefieran esperar para estar dentro de la primera Academia de la lengua. “Nosotros respetamos su decisión, creemos que estarán dentro muy pronto, es cosa de tiempo, y pensamos que entre todos podremos hacer la Academia que queremos”, ha explicado Castán.
El presidente también ha dejado muy claro que las discrepancias y el debate son muy positivas para el desarrollo de una entidad de estas características. “El debate y la implicación de todos los que aquí hemos estado significa que el Aragonés le importa a mucha gente y que debe ser un símbolo de todos”, ha apostillado.
Tras la votación y el recuento de votos el acto ha proseguido con la intervención de distintos representantes de otras autoridades lingüísticas de Aragón, España y Europa.
La Academia
Así, con las tres negativas de los últimos días, Francho Nagore, Chesús Inazio Nabarro y Chabier Tomás, la Academia de l’Aragonés cuenta con 19 académicos que a partir de este momento van a comenzar a trabajar por la lengua con unos estatutos que también se votaban esta semana. “Las normas estatutarias van a marcar cuáles van a ser las líneas fundamentales de nuestro trabajo, cómo van a actuar los académicos y determinarán sus funciones”, ha explicado el secretario de Chuntos por l’Aragonés, Fernando Sánchez.
Los académicos tienen desde este momento mucho trabajo. “Tendrán que estudiar muy bien el aragonés, tomar acuerdos en cuanto a las grafías, crear una fórmula estándar del Aragonés y, por supuesto, dignificar nuestra lengua”, ha explicado Sánchez. “La creación de la Academia no significa por ello que vayan a desaparecer las variedades locales ya que somos defensores de todas ellas”, ha apuntado el secretario. “Es más, muchos de los representantes de dichas variedades van a estar dentro de la nueva entidad”, ha apostillado Sánchez.
Con la creación de la nueva autoridad lingüística se sientan las bases para el Aragonés, una lengua románica que deriva del latín y que principalmente se habla en el Alto Aragón. La semana que viene se confeccionará el organigrama de la Academia con la elección de los principales cargos y, además, desde la organización ya tienen concertada para el próximo martes una reunión con el Gobierno de Aragón para presentar la nueva entidad. "Queremos conseguir el apoyo de la DGA para que el Aragonés tenga mucho futuro", ha cerrado Fernando Sánchez.
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