Por cierto aquí os dejo una entrevista sobre el asturianismo que aparece hoy en La Voz de Asturias
Por qué cuajan otros sentimientos nacionalistas y no el asturiano?
--Hay un grupo relativamente significativo de asturianos que piensan en clave nacionalista, o asturianista, y que organizan sus experiencias diarias en ese sentido. Utilizan sin complejos en su vida diaria la lengua asturiana como vehículo de comunicación, trabajan en empresas, movimientos, etc. que tienen una visión asturianista... Es una forma de vida para muchos ciudadanos. La historia del nacionalismo asturiano, o del asturianismo, no solo es una historia de fracasos electorales. Ciertamente, no ha conseguido fraguarse una opción política en términos electorales suficientemente sólida, pero la política es mucho más y en muchos ámbitos el asturianismo ha cosechado también éxitos. Lo que es indudable es que en Asturias existe una identidad colectiva muy fuerte, aunque no este planteada en términos nacionalistas.
--El nacionalismo asturiano actual, vive un auge, una decadencia o un estancamiento?
--Yo diría que una etapa de relativo estancamiento e incertidumbre si lo comparamos, por ejemplo, con la primera mitad de los años 90, en los que experimentó un desarrollo relativamente rápido y se afianzo como el movimiento social más importante de la Asturias de finales del siglo XX. Después, vino una etapa de fragmentación y cierta desorientación política, en la que no obstante, el nacionalismo continúo afianzándose como movimiento social y logrando introducir sus demandas en el debate político y social, aunque fuese de forma marginal. Actualmente, creo que se percibe en los ámbitos nacionalistas un desencanto bastante generalizado con la actuación de IU-BA, y se abre una etapa marcada por los viejos debates sobre la necesidad de unidad de la izquierda nacionalista y la inseguridad acerca de lo que pueda conseguir el PAS en su nueva coalición.
--Jovellanos ocupa un puesto relevante en su libro, por qué?
--Jovellanos es un referente clave en el pensamiento asturianista clásico. Fue quien por primera vez a fines del siglo XVIII, comenzó a prestar atención a la lengua asturiana desde un punto de vista científico y a planear su normalización. Y además, Jovellanos escribió sobre cultura popular, historia, defendió la Junta General cuando fue disuelta por el Marques de la Romana, etc. Jovellanos, y su grupo de colaboradores, aunque hicieron muy poco en la práctica, lanzaron muchos proyectos y abrieron posibilidades que después otros pensadores como Caveda recogieron y continuaron. Y además es clave porque, por no haber llegado a terminar nada de lo que comenzó, dejo abiertas todas las puertas.
--Durante las legislaturas del gobierno del PP, Jovellanos volvió a convertirse en un referente, en esta ocasión, para los conservadores sirve el ilustrado como una especie de comodín?
--En cierta manera sí. En mi libro, de hecho, argumento que no existe una verdad absoluta sobre Jovellanos y que sus textos e ideas actúan como estímulos que se pueden interpretar de diversas maneras. Jovellanos, por ejemplo, ya era considerado como un precursor del actual Estado de las Autonomías por autores como Caso o Pedro de Silva.
--El denominado particularismo franquista tiene un doble papel en su tesis, como recuperador o conservador y, a la vez, opresor de la lengua asturiana.
--Durante el franquismo, desde algunas instituciones como el IDEA o la misma Universidad, se prestó cierta atención al asturiano, pero siempre desde las coordenadas ideológicas del régimen. Fue a partir de los años 40 cuando empezaron a proliferar las monografías dialectales, la literatura sobrevivió, aunque siempre como literatura de segundo orden, se hicieron estudios etnográficos... Pero siempre con un ánimo que podríamos llamar conservacionista : lo que se pretendía era mantener a lo asturiano pero sin dejarlo vivir, conservado en formol, inerte.
--Sin embargo en la transición se encuentra con una especie de crisis generacional.
--Hay una generación de jóvenes, que conocen las monografías, los estudios del IDEA, pero que en el contexto de la época empiezan a cuestionar las verdades franquistas, y con ellas la idea de nación española homogénea. Lo asturiano , que durante décadas se había mantenido como un tema de estudio, entroncó con los nacientes discursos democráticos de oposición y tomo un significado completamente distinto. El tratamiento que había recibido la lengua asturiana durante las décadas anteriores, pasó a simbolizar, para determinados sectores, la opresión del franquismo. Con el surgimiento de Conceyu Bable en 1974 hubo una verdadera ruptura generacional y nació el nacionalismo moderno en Asturias.
-- Se ha convertido el Ridea en el refugio de ese particularismo franquista?
--Tengo la impresión de que el Ridea no ha cambiado mucho desde, pongamos por caso, 1950 a esta parte. Salvo algunas excepciones, claro está. Los paradigmas que transmiten a la sociedad, si bien es cierto que su presencia social y mediática es actualmente bastante limitada, encajan bastante bien con lo que llamo particularismo franquista . Dicho de otra forma, lo que, por ejemplo, muchos pueden decir actualmente desde el Ridea sobre el asturiano, si se hubiese dicho en 1956 desde el Idea, habría recibido los vítores y los aplausos de señores vestidos con camisas azules. Creo que le falta dinamismo y le sobra dogmatismo. En parte, el Ridea es un cementerio de dinosaurios.
--En un reciente congreso sobre Asturias, el Ridea vetó una ponencia en asturiano, qué le parece?
--Simplemente patético, y sobre todo bastante simbólico de la actitud del Ridea. Aceptarán de buena gana todos los estudios que hagan falta sobre el bable de nosedonde pero utilizar el asturiano como vehículo de comunicación científica es algo que algunos no pueden soportar.
--Un argumento recurrente entre los contrarios a la oficialidad es que podría aumentar el sentimiento nacionalista.
--Sus argumentos van cambiando periódicamente. Ahora está de moda el de la imposición (antes lo fue que no era lengua, que había muchos dialectos, que no había demanda, etc.). Demanda hay y, desde luego, más que para otras medidas y cambios legislativos que se han tomado. Respecto a la imposición, la cooficialidad de asturiano y castellano no tiene por que ser tal, como se dice malintencionadamente. La actual legislación descuida los derechos de una parte de la ciudadanía y la cooficialidad tiene que abrir la puerta para que se corrija ese desajuste democrático. Va la oficialidad a fomentar el nacionalismo? No tiene por qué. Y si se fortalece qué pasa, cuál es el problema?

