El Club Deportivo Mirandés oficiosamente -por un medio de comunicación- ha conseguido el objetivo de su campaña de captación: 4000 socios. Según el D.B. a principios de esta semana la cifra en el termómetro rojillo marcaba una trepidante cifra: 3600 socios y de acuerdo con el convenio suscrito con una empresa que aún no ha querido dar su nombre, cubriría los carnés restantes, en este caso, los 400 que quedaran, siempre a partir de la cifra de 3500, por lo que no es descabellado, que incluso se llegara a superar el número de los cuatro mil.
Sin lugar a dudas es una excelente noticia y viene a cumplir el objetivo planteado por la directiva de Felix Pipaón: batir todos los récords históricos posibles, en un escenario tan incierto como la tercera división.
El Mirandés que está encuadrado en el Grupo VIII de la 3º División junto a otros conjuntos de la región, está a dos puntos del primer clasificado: la Gimnástica Segoviana tras sufrir la pasada campaña un nuevo varapalo junto al descenso tortuoso que le llevó a caer en manos del Talavera C.F. en la promoción, en el último partido, agotando así todas sus posibilidades de mantener el estátus en la división de bronce, un año después, se abre un periodo electoral, se decide entre los más de 2000 socios rojillos elegir a Félix Pipaón por una mayoría abrumadora, esta sabia nueva, no condicionaría sin embargo en el primer año el futuro esperado por todos los aficionados rojillos: el ascenso. El Mirandés quedó segundo en la liga y fue encuadrado en un doble partido con el Cobeña, equipo Madrileño situado en el corredor de Alcalá de Henares cayendo derrotado a domicilio por el resultado de 3-1 y en Anduva por 1-2 con un experimentado rival. Poco después, Ismael Urtubi dejaría la disciplina del equipo de Anduva al ser rescindido su contrato por la directiva de Félix Pipaón y decidieron que era hora de apostar por un fútbol diferente. Un fútbol que promoviera el espectaculo y con un equipo de jugadores experimentados en 2º división B, e incluso en segunda división o primera (el caso de Jordi). El elegido fue el bilbaíno de cuna y burgalés de adopción Fede Castaños, segundo de Lucas, allá en la época en que los de Anduva estuvieron codeándose con equipos de la talla del Lorca y del descendido Pontevedra por el ascenso a 2º División, sin embargo, Fede Castaños apenas dos semanas después decide marcharse al Racing de Santander como segundo de Portugal. Este varapalo creó cierta incertidumbre y frenó el termometro durante una semana, al conocer el nombre del nuevo mister y asegurarse que era un hombre de fútbol, y al que le gustaba jugar bien, volvió a dar otro vuelco el termometro, junto a los fichajes estrella: Mayordomo e Iván Agustín. Sin duda, Castaños fue el entrenador más corto de los 78 años de historia del Mirandés, y le siguió en el primer partido de liga un incorporado Driss, que fue fichado justo antes de empezar la liga, y se marchó abonando supuestamente una cláusula de rescisión, a la semana siguiente. Datos anecdóticos los del jugador que más rápido ha decidido marcharse del Mirandés, y del míster que también, hizo lo propio.
Y hoy a fecha de 21 de octubre del 2006, podemos afirmar que para una ciudad modesta, y un club modesto en recursos exteriores, es un orgullo que cuatro mil socios, vistan la elástica rojilla y contribuyan a un proyecto a largo plazo que deja entre ver la posibilidad de ser pequeños, pero entre gigantes.
Cabe recordar que Miranda de Ebro tiene una población que no excede los 40 mil habitantes (no censados) y por lo tanto, la proporción es muy importante, un 10 por ciento de la ciudad, está con el Mirandés.
¡Aúpa Mirandés!
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