INTOLERABLE Y BURDA FALSEDAD
Los Verdes de Laciana, ni conocemos al tal Luís Marcos ni tenemos nada que ver con su tenderete político. Consiguientemente,
es rigurosamente falso que nuestra organización vaya a integrase en esa supuesta plataforma política a la que se refiere la información que publica Terra Actualidad- Europa Press el domingo, 12 de noviembre de 2006.
(...) También se refirió a la situación de Los Verdes de Laciana que, descontentos con la política municipal de Izquierda Unida en Villablino, donde gobierna con el Partido Popular, podrían desmarcarse de Izquierda Unida-Los Verdes y unirse a la futura Alternativa de Castilla y León (...)
Estas aseveraciones del señor Luís Marcos, demuestran que no tiene la menor idea sobre el proyecto político de Los Verdes en Laciana. Que sepa, que en el hipotético caso de que concurramos a las próximas elecciones municipales, lo haremos en solitario. Sin ataduras de ningún tipo.
Los Verdes de Laciana nada tenemos que ver con formaciones regionalistas y menos aún, con aquellas que exhiben el estandarte del nacionalismo. Nuestra vocación europea va mucho más allá de esos reinos de taifas que tienen como único objetivo llegar al poder por el procedimiento que sea.
Desmentimos igualmente que Los Verdes de Laciana formen parte de esa supuesta entelequia que algunos pretenden formar – principalmente IU - y que se denominaría Izquierda Unida-Los Verdes.
El proyecto de Los Verdes representa el futuro, mientras que el de Izquierda Unida encarna el pasado y se inscribe en la cultura de los partidos políticos tradicionales. Todos ellos muy alejados de las tesis defendidas por el ecologismo europeo. De manera que nuestros militantes, simpatizantes y amigos, pueden tener la completa seguridad de que jamás nos prestaremos a combinaciones espurias para ocupar ninguna parcela de poder. Eso lo dejamos para otros. Como por ejemplo, para IU en Laciana, que está dispuesta a formar parte de un tripartito, PSOE, PP y la propia IU. Es decir, un revoltijo de siglas y de nombres propios, sin más objetivo que seguir donde están.
De hecho, Guillermo Murias lleva meses, por no decir años, repitiendo el mismo estribillo. Lo que demuestra la escasa confianza que tiene en su propio ideario. Pues en realidad, su única preocupación es seguir gravitando en la órbita del poder, por imperiosa necesidad para seguir subsistiendo en Laciana.