El Consejo de Ministros aprobó ayer el Real Decreto de Enseñanzas Mínimas de Primaria, desarrollando la Ley Orgánica de Educación (LOE), decreto que se empezará a aplicar a partir del curso que viene, (temporada 2007-2008).
Los alumnos tendrán cuarenta y cinco horas más de Matemáticas y de Inglés, y veinticinco horas menos de Lengua y Literatura CASTELLANAS.
Lo primero que ésto me sugiere es que la lengua y literatura propias de las Comunidades con esa especificidad quedarán a salvo, ya se cuidarán ellos de que sea así, mientras que la lengua de Cervantes y su Historia, van a pasar en nuestra tierra y me refiero a toda España, a engrosar las polvorientas estanterías de recónditas bibliotecas.
Alguno pensará que estoy exagerando, pero, ¿Qué será de Gonzalo de Berceo, del Arcipreste de Hita, de nuestra amiga Celestina o del Lazarillo, por citar los ejemplos más célebres, pertenecientes a la primera época de nuestra Literatura?
Se avecina una nueva hornada de asnos, que no sabrán distinguir entre hubo, había y habría, entre objetos directos, indirectos y circunstanciales; adjetivos, adverbios y proposiciones,... por rollo que ésto nos pueda parecer, resultando que no sabrán aplicarlo a la práctica, es decir, expresarse bien, hablar el castellano con propiedad. Ya noto yo, -lo digo con toda humildad-, incluso en generaciones no tan lejanas a la mía, cierta incapacidad para la expresión, cierto catetismo que lógicamente, irá en aumento con este tipo de medidas.
Gente como Neruda, Borges, Machado y Lorca, -es una exageración, pero es ilustrativa-, serán reconocidos como centrocampistas dentro de unos años. A lo mejor es una "rayadura" mía, por eso me gustaría saber lo que opináis.
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