La decisión del Fiscal General del Estado, Sr. Conde Pumpido, de instar judicialmente la retirada de la revista satírica el Jueves no por esperpéntica deja de se inquietante. Supone un grave ataque a la libertad de pensamiento y expresión. Supone una exclusión de las normas democráticas sobre la Institución monárquica. Veda y blinda esa institución ya silenciada y a priori favorecida por todos, de todos los signos políticos e instancias mediáticas.
En España ya se gritó una vez "vivan las caenas". No puede volver a repetirse tamaño desatino.
Por desgracia en España los avances van lentos, las revoluciones sociales se hacen a medias, se gobierna a trancos y los altos poderes muchas veces van contra el propio pueblo vapuleado. Así nos va, disgregados, cuestionados, no fiables. Triste esta soleada España.
La Monarquía como cualquier otra institución democrática debe estar sometida a la crítica, a su cuestionamiento. Uno de los avances del pensamiento occidental ha sido desacralizar la vida pública, ha sido devolver el poder de las Monarquías de origen divino al pueblo, único depositario y responsable de sus instituciones. Alguien, ya clásico, tan realista como Chateaubriand en 1820 dejó dicho,alto, claro y maravillosamente todo sobre el poder real -Memorias de Ultratumba-
Digamos, desde Castilla, un no rotundo a este ataque a la libertad. Viva la libertad ! Viva Castilla !