El ínclito ¿periodista? deportivo de claras tendencias madridistas, por decirlo suavemente Tomás Guasch, ha decidido hacer gala de su ignorancia, presumir de su ignorancia y escribir esto,
Luego está lo de Laporta y Madrid, a la que define como una distribución administrativa creada por la Constitución. Madrid no existe; es una ficción: ¡ya era hora de que alguien lo denunciara! No tiene historia ni pasado ni idioma ni pueblo ni cultura propia ni ná. No existieron el 2 de mayo, ni las Escenas Matritenses de Galdós, el ¡no pasarán! se gritó en Jaén y deportivamente hablando, Santana nunca ganó Wimbledon ni el Madrid ganó 9 Copas de Europa. Madrid es una ficción y Laporta lo ha descubierto: deberían darle un premio.
Que sabe poco de futbol ya lo sabiamos, pero además es que no tiene ni puta idea de lo que es Castilla, de la identidad castellana de Madrid ni de los orígenes castellanos del centro de la meseta. Este subnormal es aquel del que hablaban cuando dijeron aquello de que un tonto, -Tomás Guasch- sigue una linde, la linde se acaba y el tonto sigue.


