Precisamente preguntaba si lo habías leído porque no sabía qué pensar con el argumento, menciona Castilla, bien, lo demás es muy raro, también...jajjaja.
Esperaré a la crítica castellanista completa, pero sí es cierto que a veces la gente da sorpresas, todavía recuerdo cuando a un jefecillo cántabro de mi empresa le dije que yo era castellano (no recuerdo cómo salió el tema), y dijo, pues ya somos dos.
Y era pepero a muerte. Asique a leer todo el mundo, leñe.
Supongo que el jefecillo tendrá una edad por que si es joven pocos te dirán eso. Yo tengo una compañera de Santander y dice que cuando le pusieron el nombre de Cantabria a la provincia flipaba, que a ella de toda la vida la habían enseñado que Santander era Castilla-La Vieja. Lo mismo puede decirse con gente mayor de Madrid.
Es lo de siempre, el problema ha sido y es el Estado autonómico este que padecemos (algunos).
¡Efectivamente!¡qué padecemos algunos!.Porque este estado de las autonomías discriminatorio, desigual, injusto, hecho a la medida de los ...no digais quien, o decirlo bajito shhh, que algunos castellanistas se molestan si mentamos su nombre.
Respecto del tema del libro, pues que decir..que la implicación de los vascos en la construcción de la Castilla condal está más que demostrada, así como en el nacimiento del castellano.Pero eso sí Castilla es muchísimo más, Castilla fué libertad para todos los que estaban perseguidos tanto por el régimen feudal leonés como por la tiranía islámica. Y por eso somos lo que somos y no sólo vascos en un rincón levantando piedras.

