La principal ventaja económica de una hipotética unión castellana sería, en mi opinión, el desvío de los excedentes que se producen en madrid a zonas que lo necesitan más que donde actualmente va. La solidaridad interregenional la gestiona el estado español y ya sabemos cómo se entiende esta solidaridad: las autonomías A quieren lo suyo y lo de los demás, mientras que las B se han de conformar con lo que les cae de la mesa.
No es exactamente así.
Es más bien:
Autonomías A: ricas, con consideración de "nacionalidad" quieren lo suyo para sí (las conocemos todos)
Autonomías B o "plañideras": menos ricas, o mejor dicho, con una gestión de mierda, pero que por su fuerza regional y su lloriqueo ejemplar consiguen de cara al Estado el mismo estatus que las A y sus mismos derechos chupando del bote sin calibre (tipo Andalucía, Galicia, Canarias, Murcia, Valencia)
Autonomías C (Castilla, o "Doblemente España" como dice Cospedal): a comer las migajas que caen de la mesa.
Esto por muchos españolazos se olvida, pero si el Estado Español ha seguido su deriva autonomista no se debe a las autonomías "A" sino sobretodo, a las "B", y a quienes principalmente jodería una reunificación castellana plantando cara al Estado autonómico sería a esas.

