Tanto Maelstrom como Panadero, ponéis sobre la mesa la siguiente cuestión ¿Hay que estar preparado para apreciar el arte?
Mi respuesta es sÃ. Pero no sólo el arte sino casi todo.
Por ejemplo, muchas veces en estos foros se han quejado de la intromisión de "advenedizos" en materia de Historia, caso de Anselmo Carretero que era ingeniero industrial y se dedicaba a "pontificar" acerca de lo que era o no era Castilla. "Si pero este señor no era tonto, no hay que tener un tÃtulo necesariamente" -se podrÃa decir en su defensa-, lo cierto es que los patinazos de los "advenedizos" en materia histórica son frecuentes y se puede comprobar en los diarios digitales en donde los opinadores oficiales meten la pata un dÃa sà y otro también.
¿Cómo es posible que gente como el aludido Marcel Duchamp (el del urinario), o Andy Warhol (el de la lata de sopa), estén en el Olimpo de los artistas?
La iconografÃa de Warhol ha sido reproducida hasta la náusea en los medios de comunicación, en los carteles, en las campañas electorales..., no se puede negar que ha tenido éxito, es incontestable.
Estoy seguro de que esta buena señora no mearÃa en el urinario de Duchamp pero por una razón: no tiene pito. PodrÃas desde conectar el móvil para recargarlo hasta dormirte una siesta en un "chiringuito" de esos que montan en los museos de arte contemporáneo, yo el año pasado me llevé un vinilo que estaba colgado en una obra de una exposición y no porque lo afanase, sino porque te lo podÃas llevar, habÃa una ristra de ellos colgados a disposición del visitante, es decir, te podÃas llevar media "escultura" a tu casa ¿Le quita esto valor a estas obras?
La cuestión es que hay que saber interpretar esas obras. Una pieza de hormigón en una exposición del arquitecto manchego Miguel Fisac descontextualizada es irrelevante. Sin embargo viendo las fotos de la exposición llegas a conmoverte ante esa pieza, que además de apreciarla como elemento ingenioso en la construcción de un edificio, te resulta misteriosamente bella.
Aparte de la sensibilidad, hay que tener cierta preparación, una información previa que te permita apreciar la obra. Incluso en los cuadros de los maestros antiguos. Por ejemplo, estoy seguro de que yo todavÃa no me he enterado (por pura vagancia o ineptitud), de en lo que consiste el cuadro de Las Meninas, y mira que he ido a exposiciones...
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