Bueno, os voy a rebelar el secreto mejor guardado (sin contar la fórmula de Coca-Cola).
Nuestra historia se remonta a mucho tiempo atrás, cuando todavía no habían llegado los europeos a norteamérica.
Había un cocinero apache muy feo el pobrecico, de estos que no mojan ni pagando 1 millón de pieles de búfalos.
Intentaba conquistar a las zagalas a través de su cocina y sobre todo por sus postres dulces en forma de círculo. Era conocido en todo el valle por esta razón (bueno y por su gran fealdad).
Un sabado por la noche, como era de costumbre, esta desnudo en su tipi listo zz29 para "darse mucho amor", pero tropezó con su ropa cayendo de bruces encima de sus pastelillos atravesando con su tocha (no la nariz) uno de ellos.
A la par que le gusto esta nueva sensación, descubrió que le había hecho un agujero en el centro. Como le gustó tanto esta nueva forma de amor, utilizó todos sus pastelillos, sin dejar ninguno sin agujerito.
A la mañana siguiente se asombro mucho que ahora sus pastelillos con agujero tenían aún más éxito que antes. Desde ese momento todos los pastelillos que hacía lo desvirgaba.
Así asi.....hasta que llegaron los europeos, la conquista del oeste, y descubrieron estos pastelillos los colonizadores. Se apropiaron de la receta y hasta el día de hoy.
PD: ¿volveréis a comer donuts?
PD2: por si acaso, aclaro que no tomo sustancias extrañas, todo sale de mi linda cabeza.

