No condenar la violencia o a ETA no implica necesariamente apoyarlas. Para acusar a ANV (o Batasuna) de que apoya la violencia o a ETA hay que demostrarlo con hechos (comunicados, ruedas de prensa, etc) no con suposición individuales.
Y el único camino para solucionar el conflicto vasco es dialogando, y hasta que que no sea así la violencia va a estar presente nos guste o no.
Propongo un juego llamado "El chulo putas, sus amigos, los equidistantes y los vecinos".
Imagina un chulo de barrio (=ETA), porque nadie negará que actua con chulería (=asesinato, chantaje, amenaza), y que este chulo tiene acongojado a la mayoría del vecindario (gran mayoría de la sociedad).
Da hostias o amenaza con darlas a quien sea (=incluso ex-amigos) porque plantea las cosas en términos de "o conmigo o contra mí" si no se hace caso a lo que plantea. Da igual lo justo o injusto, real o imaginario que plantee: él dice que es justo y necesario, que habla en nombre de muchos, y que lo que hace y cómo lo hace es una respuesta reactiva a como se comportan los representantes del vecindario. Él quiere organizar con otros un nuevo vecindario independiente, con sus propias reglas, pero no le dejan... porque el vecindario tienen reglas e intereses que hace que no puede dividirse, obligando a todos a convivir, y porque en la zona que el chulo quiere separar la mayoría de los vecinos bien no quiere separarse, o bien queriendo separarse, no quiere que el chulo sera "el rey"... El "chulo" dice que su parte del vecindario tiene que pronunciarse libremente... y que, porque no le están dejando, el debe ser chulo.
El chulo dice y justifica que actua como actua (=violencia) como respuesta defensiva a una actuación chulesca (=violencia) que viene de muy antiguo y todavía está presente de la mayoría del vencindario, mejor, de los representantes... que manipulan y usan a la mayoría de vecinos en contra de sus propios intereses porque son gilipollas (=alienados).
Y es que hay que recordar que además el chulo no está solo: hay gente del vecindario (una minoría) que dice expresamente que el chulo tiene bastante o toda la razón, que la mayoría del vecindario no respeta los derechos y necesidades de ese chulo y sus colegas, y que ese chulo, en realidad, expresa, representa y da voz a cuestiones justas de muchos vecinos. El chulo al chulear demuestra la chulería de otros. Es una chulería bronca, pero es la manera de actuar la minoría ante la chulería "perfumada" y "legal" de la mayoría.
Algunos -es cierto- no comparten sus formas, pero sí sus fines. Normalmente hablan de dialogo. Les llaman los "equidistantes", porque consideran que en esto de las chulerías, "en todas partes cuecen habas". Defienden charlar y llegar a acuerdos. A veces el chulo no los quiere porque les llama traidores o tontos del culo (suelen venir de su antiguo circulo de amistades). O los utiliza en su "buena fe" -que los hay-, para sus fines. Porque el chulo, le hagan caso o no en lo que "formalmente" dice, vive desde hace mucho de su chulería...
Otros, sin embargo, además de tener los mismos fines, justifican las formas del chulo, se ven representados en el chulo, porque les "gusta su lucha". Unos por esteticismo romántico (=plantar cara a la hipocresia vulgar). Otros porque son en realidad "chulos". Piensan que los chulos agresivos son los otros, que por mucha apariencia de poca chulería (=Estado de derecho), son en realidad los "chulos" fuertes (=Fascistas). Consideran que no hay que aceptar el "chantaje" de las reglas de juego que impone la mayoría que fuerzan a perder necesariamente a la minoría y que hacen al chulo ser "chulo" y actuar "chulescamente". La lógica que defienden es la dialéctica de la guerra porque la mayoría lleva a esgrimir esta lógica.
Por lo tanto, esa minoría de vecinos no va a condenar a ese chulo porque en realidad sólo está reflejando la violencia de una reglas de juego que benefician sólo a la mayoría del vecindario, y el chulo-malo no es tan malo, ni la mayoría-bueno es tan bueno...
Los que comparten fines, pero no medios, y defienden el dialogo entre partes, lo dicho: o son buena gente que creen que hay que acercar posturas, que rechazan la violencia, o son una de las caras del mismo "entramado del chulo", pero con el papel de "poli bueno".
Si son buena gente, expresamente denunciarán las formas del chulo. Si son "polis buenos", se demostrara siendo remolones en la condena...
(A) Algunos dicen: el chulo, mientras haya violencia de la mayoría (reglas de juego y comportamientos hipócritas), no va a dejar de ser chulo. Y nosotros no vamos a "condenarlo". Al contrario, "pelillos a la mar" porque la causa es justa y los otros no son tan buenos.
(B) Otros "algunos" dicen: como esto es el cuento de nunca acabar, la solución es que hablen todas las partes, para llegar a acuerdosy abandonar las chulerías. Por que hay que acabar con todas las chulerías (=fin de todas las formas de violencia). Aquí cabemos de todo, pero lo que tenemos en común es: ¿no es mejor dialogar que darse de hostias...? Son como los "cascos azules".
¿Donde estará ANV como organización en el mejor de los casos: en (A) o en (B)? No es lo mismo.
La gente de la mayoría estar harta de la chulería, y son cada día más los que piensan que hablar con el chulo no lleva a ningún sitio, salvo a chuparsela al chulo. Algunos dicen que se ha intentado dialogar muchas veces, pero que el chulo y sus amigos (ya da igual si rechazan o no las formas chulescas de su amigo, porque comparten los mismo gustos y son muy timoratos a la hora de sacarles los defectos chulescos al chulo) siguen erre que erre. Así que, a ver quien puede más...
Y en esas estamos. Esperando un muerto, mientras algunos piden que se hable con el asesino.
Yo creo que el tiempo del dialogo pasó (mediáticamente) y sólo queda deterner al asesino antes que asesine. Y si el asesino se demuestra que tiene compinches en infraestructura o dándole palmaditas, pues tambien hay que deternelos.