Todos conocemos el gravisimo problema que sufren los pueblos castellanos debido a la fuerte emigración de los años 60-70 y 80 y que todavÃa dura. La mayorÃa de los pueblos han perdido más del 50% de sus habitantes, estando muchos de ellos al borde de la desaparición.
Actualmente se produce en los pueblos un fenómeno inverso al de las grandes ciudades, es decir, personas que tienen el trabajo en su pueblo y se han trasladado a vivir a la capital de la provincia.
Funcionarios, autónomos y asalariados sin distinción vienen a los pueblos por la mañana y regresan por la tarde a la capital donde hacen su vida social, sus compras etc. Esto significa que su salario lo ganan de las personas del pueblo pero no dejan apenas ningún beneficio en ese mismo pueblo.
Hasta algunos agricultores siguen este sistema. Vienen al pueblo con su coche, lo cambian en la nave por el tractor y al anochecer regresan a la capital.
Mi pueblo tiene 1.200 habitantes.He contabilizado que 92 personas trabajan en el pueblo y viven en la capital. Esto parece poco, pero si multiplicamos esa cifra por una media de 3 miembros de la familia, nos sale que son 276 personas que no compran en el pueblo, ni hacen vida social en el mismo, ni intercambian ideas con los del pueblo etc.
De 25 maestros de básica y de ESO solo viven en el pueblo 4
De 12 empleados de banca solo viven en el pueblo 2
De 7 sanitarios viven el pueblo 0
Etc
En el caso de médicos y maestros la cosa es más grave,ya que siempre es bueno que estos profesionales conozcan a las familias y las circunstancias de los alumnos y pacientes. Viviendo fuera del pueblo esto es imposible.
Quisiera preguntar y conocer vuestras opiniones.
¿SerÃa posible obligar por Ley, al menos a los funcionarios, a residir en los pueblos donde trabajan?
¿SerÃa esto constitucional?

