Entrevista de DIARIO DE BURGOS al candidato a la alcaldía de Aranda de Duero por el PCAL.
José Ignacio Díez Arranz: "La política municipal no puede entenderse como un oficio, sino como un servicio".
Nacido en Burgos hace 38 años, lleva más de una década establecido en la capital ribereña, donde mantiene cercanos vínculos familiares. Este ingeniero agrícola desarrolla su carrera profesional en Aranda, al frente de su propia empresa. Argumentos que le llevan a afirmar que «me siento un arandino más. Si no de hecho, sí al menos de derecho». Y como tal, ha asumido el reto de encabezar la candidatura del PARTIDO DE CASTILLA Y LEÓN (PCAL) al Ayuntamiento de la capital ribereña con la esperanza de obtener el apoyo suficiente para, al menos, lograr cambiar la gestión.
José Ignacio Díez toma el relevo de Sebastián de la Serna como cabeza de lista del PCAL de cara a los próximos comicios municipales. Una responsabilidad que asume desde la voluntad de servicio y el anhelo por cambiar las cosas en la que considera ya su ciudad, Aranda.
¿Qué lleva a un profesional liberal joven a adentrarse en la política municipal, de la mano, además, de un partido minoritario, lo que no garantiza que tenga éxito en esta empresa?
Aunque suene un poco trasnochado, una cierta conciencia social. Ver cómo la población en la que vives, donde desarrollas tu vida personal y laboral, con una potencialidad bárbara, no la desarrolla sino que, acaso, va hacia atrás. Si tienes interés por las cosas, te gusta que progresen, primero tienes una sensación de indiferencia, luego sorpresa, hartazgo y al final, casi hastío. Creo que estoy entre las dos últimas. Y un cierto espíritu de servicio que de una manera o de otra también hay que tener. ¿Y por qué en un partido pequeño? Por el espíritu de servicio y porque mi modelo de persona, profesionalmente hablando, es de gestión no político. Creo que puedo pasar parte de mis capacidades profesionales a la gestión de un municipio, Aranda, que hoy por hoy es mi límite. No tengo otra aspiración.
Desde mayo de 2010 ocupa el cargo de coordinador comarcal del PCAL ¿le ha permitido este puesto ponerse al día de la realidad política de Aranda?
Claro. La aceleración ha sido absoluta. Una persona como yo, sensibilizada con los temas políticos, que ha pasado a tener un puesto de responsabilidad en un partido, me ha imbuido desde el principio en cómo funciona un partido y en la vida municipal.
Durante su presentación aseguró que la pésima gestión realizada en Aranda ha convertido a la capital ribereña en una localidad «mediocre, gris y decadente». ¿Catastrofismo electoralista o realismo ciudadano?
No dije que la ha convertido, sino que se está convirtiendo. Soy bastante escrupuloso de las palabras. Si tengo que matizarlo, lo hago, pero no creo que a nadie le quepa la menor duda. He reflexionado sobre ello y comprendo que hay determinadas cosas que pueden sentar mal, pero no tiene por qué ofender. Si a alguien le ha ofendido tendrá que reflexionar por qué.
¿Cuál será su receta para salir de esta situación?
El cambio de modelo de gestión. No digo que no se haya hecho nada bien, sino que con un modelo de gestión pésimo es muy difícil hacer algo medianamente bien. No es que cada asunto particular se haya hecho mal, es que con el modelo de gestión con el que se aborda sería un milagro que saliera bien.
Los ciudadanos suelen pedir proyectos concretos; ¿cuáles serían las líneas de su programa?
La descongestión de la gestión municipal. Es muy difícil plantear proyectos nuevos cuando todo el espacio está ocupado por los de siempre, inconclusos, sin resolver y emponzoñándolo todo. Es muy difícil derivar energía, recursos económicos, humanos, capacidades si estamos enfrascados en una docena de asuntos que no se resuelven por ese nefasto modelo de gestión.
¿Qué papel puede jugar el PCAL en este panorama político, teniendo en cuenta que se le reserva prácticamente una presencia residual?
Nunca sería nada residual. Vamos a hacer frente a nuestra responsabilidad saquemos lo que saquemos. No se trata de dar la espantada ni ser un fuego artificial. En todo caso, creo que el panorama está cambiando a pasos acelerados. Prueba de ello es que nos dedican más tiempo, no solo los medios de comunicación, sino el resto de los partidos. Será por algo, porque hayan visto que tenemos más probabilidades de las que se preveían. Hemos pasado de ser los comuneros del golpecito en la espalda a un partido que sí que puede representar intereses ciudadanos. Con este aire nuevo, con la introducción de gente nueva, muy capaz y sin desperdiciar la experiencia de la gente que estaba, se forma una opción real. Y lo digo y lo repito, yo me presento a la Alcaldía, luego llegaré a donde tenga que llegar. Si tenemos que hacer un papel menor, lo haremos con la máxima dignidad de que seamos capaces.
En esta convocatoria parece que habrá mayor presencia de pequeños partidos; ¿afectará negativamente esta atomización del voto minoritario al PCAL?
En primer lugar, quiero dejar claro mi absoluto respeto a todo el que se presente porque es completamente lícito y demuestra una inquietud digna de elogio. Ahora, apelo a la responsabilidad tanto de esas iniciativas que se presenten como a la de los propios ciudadanos. Habrán de distinguir entre proyectos trabajados, con recorrido y cierto grado de apoyo, de aquellos más o menos espontáneos que pueden, en un intento de ayudar a la ciudad, acabar haciéndole el juego a los grandes. El reparto de votos y la ley electoral son muy injustos. Una excesiva dispersión de votos entre los pequeños partidos haría que los dos grandes salieran muy beneficiados. Los ciudadanos habrán de reflexionarlo cuidadosamente.
En el mandato 2003/07 tuvieron la llave de la gobernabilidad y pactaron con el PP ¿es pronto para hablar de acuerdos a partir del 23 de mayo?
Yo, en esas fechas, no estaba. Soy heredero de esa inercia, de la opinión pública y de lo que les pareciera, pero no me puedo hacer responsable ni para bien, ni para mal. Pero no es pronto para hablar de acuerdos, porque sin ellos ¿cómo se puede gestionar un Ayuntamiento? Lo que no sabemos es ni qué acuerdos ni con quién. Nosotros estaremos encantados de alcanzar acuerdos puntuales para temas puntuales en momentos que lo requieran. Siempre y cuando estén escritos y firmados. Pero no entendemos una gestión municipal sin diálogo, sin capacidad de negociación y sin acuerdos.
¿Cree que les han perdonado aquellos votantes que consideran que traicionaron su ideario progresista al pactar con el PP?
Quizás en aquel momento hubo una falta de comunicación y de una correcta explicación, más en sí que el hecho de lo que se hizo, que seguramente estuvo bien. Ahora estamos haciendo un esfuerzo absoluto por explicarlo bien y muy concisamente. Si alguno nos tenía que perdonar, lo habrá hecho seguro, solo por la fuerza y la energía que estamos echando ahora y la capacidad de poder hacer las cosas bien. Y los que no nos tenían que perdonar, espero que nos sigan apoyando para obtener buenos resultados.
Es la primera cara nueva en un escenario político en el que los mismos nombres se repiten desde hace años. Precisamente, fue muy crítico también con la asunción cuasivitalicia de algunos cargos públicos. ¿Llegará al Ayuntamiento con fecha de caducidad?
Primero, los ciudadanos tendrán que querer que llegue. Pero, desde luego, con fecha de caducidad. No quiere decir que sea algo efímero o espontáneo. Pero hay que tener un horizonte razonable de permanencia. Más de dos candidaturas, tres a lo sumo, suponiendo que haya proyectos que requieran de un seguimiento, no tiene sentido. La política municipal no puede pretenderse como un oficio, sino como un servicio. No nos gustan las poltronas.
¿Se dejará notar este aire fresco en el resto de la candidatura?
Por supuesto. Además, con el apoyo de todos, la generosidad de las personas que llevan mucho tiempo en el PCAL que dejan paso a gente nueva que demuestra todos los días sus altas capacidades. Es conveniente cambiar, que gente nueva se incorpore a la política municipal, ideas nuevas, ganas nuevas y nuevas energías.
Sin embargo, hace días, Sebastián de la Serna apuntó la posibilidad de que vuelva a ocupar un puesto de salida en la candidatura del PCAL, lo que muchos consideran que demostraría que no ha habido una renovación de facto...
Mucha gente no ha comprendido la ironía que ha tenido Sebastián de la Serna. Se va a ver muy pronto cómo se va a materializar la generosidad de las personas que han estado peleando, que han comprendido que la renovación es importante.
Convenza al electorado de por qué debe apoyarle...
Queda reflejado en lo que he dicho hasta ahora. Podría decir muchas más cosas pero podría resultar pretencioso. Lo dejaré en capacidad de gestión demostrada en el ámbito profesional, capacidad de diálogo, juventud, aunque con un recorrido de más de 12 años en el ámbito profesional, me sé rodear de personas con altas capacidades que me hacen ser mejor, no tenemos ningún afán de permanencia política. Nuestra candidatura es de gestión, con ánimo de cambiar el modelo de gestión y de convencer a los ciudadanos para que aprecien todo el esfuerzo que alguien que no se dedica a la política tiene que hacer para encabezar o acompañar un partido como éste.
¿Cómo valora al resto de candidatos?
De nuevo, en primer lugar, reiterar mi absoluto respeto. Si de algo queremos huir es del viejo truco del ‘y tú más' que a nadie beneficia. Raquel González no me parece ni bien ni mal, puesto que desconozco los entresijos internos del PP pero entiendo que si la han elegido es porque es la mejor candidata. Respecto al PSOE, creo que repite candidatura. Si es así, tendrían que haber tenido un poco de pudor. Y respecto a candidaturas pequeñas, respeto absoluto y apelar a la responsabilidad. Me atrevería más a hacer una valoración de los grandes partidos, diciendo que cualquier maquinaria de estas características al final ¿hasta qué punto es sensible con la municipalidad?
¿Se atreve a hacer una quiniela sobre los resultados del próximo 22-M? ¿Qué papel le augura, al menos, a su formación?
Creo que el PCAL va a tener un papel absolutamente relevante en la gestión municipal porque estamos haciendo un esfuerzo brutal para que los ciudadanos se impregnen de nuestra ilusión y el mensaje que queremos transmitir. La situación nacional e internacional también favorece que un partido como el nuestro pueda acceder a unas cotas de poder y la gestión de los dos grandes partidos en el Ayuntamiento de Aranda, desde luego, no nos lo complica más.
Su indumentaria el día de su presentación, con chaleco y corbata, ha hecho que a nivel popular se hayan empezado a referir a usted como ‘Zipi y Zape'; ¿se toma ese chascarrillo como muestra de que ha conectado con la ciudadanía o un aviso de que necesita mejorar su imagen?
Es una broma de bastante buen gusto, no me molesta en absoluto. Pero tiene más importancia de lo que parece porque despierta la idea de una imagen nueva, refrescada, que aleja de los estereotipos que al PCAL le habían asociado sus detractores para desmerecerles. El Partido de Castilla y León puede ser tan moderno, responsable y capaz como cualquiera. O más. Si una broma de este tipo consigue desmontar esos viejos estereotipos.
(Fuente N.L.V. / Diario de Burgos)