La presencia en tierras del Condado del hombre del Paleolítico está probada, dados los numerosos poblados hallados en las terrazas del río Ayuda. Destacan los hallazgos de mazos de ofita, puntas de lanza, hachas, raederas, buriles, etc. Así mismo, en Laño y Marquínez se encuentran enterramientos rupestres que introducen el hacha pulimentada, la cerámica de coloración negruzca y rojiza, con decoración en cuerdas e incisiones unguiculares en las galbas (Santiuste, entre Añastro y Cucho).
Más tarde aparecen poblados castramentales de la Edad de los Metales ubicados en lugares estratéticos defensivos (Santuste y San Formerio). Así mismo existen vestigios de las primeras oleadas célticas en el Cerro de S. Formerio, donde encontramos cerámica excisa, puntas de lanza y fíbulas de tradición de la cultura de Hallstat.
Sin embargo, hemos de esperar varios siglos, hasta la época de los romanos, para encontrar los primeros testimonios escritos en los que aparece el nombre de "Treviño". Son varias las versiones acerca del origen de dicha denominación, aunque la más aceptada es que porviene del apelativo romano "Trifinium" (tres fronteras, límite de tres propiedades, regiones, pueblos o gentes. Caro Baroja da como seguro que se refiere a las tres gens históricas vascas (várdulos, caristios y autrigones).
Parece ser que en época romana, Pompeyo visitó y cartografió el Condado en el mes de noviembre del año 75 a. C., cuando se dirigía a Pompei-lona (Pamplona).
También se tiene constancia que César Augusto estuvo en el 30 a. C. en la campaña para someter a los vascones. Incluso Julio César fue el primero en descubrir el valor estratégico del Cerro de Añastro (hoy San Formerio).
En época visigótica son varios los testimonios que hablan de la zona, refiriéndose a campañas de los distintos reyes contra los vascones.
Habrán de pasar varios siglos para la fundación de Treviño. Ésta se realizó en el año 1161 a cargo del rey de Navarra Sancho VI el Sabio.
La incorporación definitiva de Treviño a Castilla data del año 1200. En aquel año, Alfonso VIII de Castilla declara la guerra al rey de Navarra Sancho VI el Fuerte (auxiliado por los almohades). La victoria fue para las tropas castellanas y Treviño quedó anexionado a Castilla.
Durante el siglo XIII tiene lugar en la zona una gran expansión demográfica, llegándose a crear 38 aldeas nuevas que se esparcen en su mayoría por el costado occidental de los Montes de Vitoria. Testimonio de este empuje demográfico son los diversos templos románicos de la zona.
Es a partir de esta época, con Alfonso X, Sancho IV y Fernando IV cuando tiene lugar la confirmación de costumbres y franquicias de la villa, fijando sus términos.
El 8 de Abril de 1366 Enrique II de Trastámara concedió a Pedro Manrique, como pago a los servicios prestados, la villa de Treviño de Uda con todas sus aldeas y términos. Por tanto pasa de ser zona de realengo a zona de señorío.
Al morir Pedro Manrique, se hace cargo del señorío su hermano Don Diego, el cual murió en Aljubarrota (1385) luchando contra los portugueses. Un nieto de Don Diego, Diego Gómez Manrique, recibió del Rey Juan II de Castilla en 1453, el título de "Conde de Treviño". Un hijo de éste, Pedro Manrique de Lara, recibió de los Reyes Católicos el título de Duque de Nájera (título que hoy día ostentan).
En el siglo XVI los Condes de Treviño, que eran ya desde 1593 Duques de Nájera, construyeron su palacio, hoy día Ayuntamiento de la Villa.
Son varias las peticiones de incorporación de Treviño al territorio de Álava a lo largo de la historia. En este contencioso los hechos más destacables son los siguientes:
1º) 1646: Al igual que sucede con Oñate a Guipúzcoa o las Encartaciones a Vizcaya, una representación treviñesa solicitó la incorporación del territorio ante las Juntas Generales de Álava.
2º) 1833: Javier de Burgos realiza la división de España en provincias, quedando Treviño asignado, por Real Decreto, a la provincia de Burgos.
3º) 1917-1919: La Cámara de Comercio e Industria de Álava solicitó a la comisión extra parlamentaria vasca que se incluyera el Condado de Treviño en el Estatuto Vasco. La caída del gobierno Romanones arrastró consigo dicho estatuto, y con él la posibilidad de incorporación.
4º) En mayo de 1936 el Ayuntamiento de La Puebla de Arganzón solicitó a la Diputación de Álava que apoye las gestiones para la incorporación.
5º) El 20 y 22 de Junio de 1940 los dos ayuntamientos del Condado piden iniciar el expediente de agregación del Condado a Álava.
6º) 1958: El Concordato de ese año trata de hacer coincidir las administraciones civil y religiosa.
7º) El 26 de Enero de 1980 el Ayuntamiento de Treviño aprobó una moción en la que se solicita la incorporación del Condado al territorio de Álava y a la Comunidad Autónoma del País Vasco. En mayo la sala de lo contencioso-administrativo de la Audiencia Territorial de Burgos desestimó el recurso.
Esto lo he encontrado navegando por ahi. Lo que mas me ha llamado la atencion es la ultima parte.
Un saludo.

