A pesar de lo dicho anteriormente, os cuento un poco de mi vida, y ya me direis...
Soy hijo de emigrantes castellanos en Valencia. Harto de ruidos, tráfico,prisas y estrés, regresé a mi pueblo en Castilla. Con lo que tenía ahorrado -que era bien poco-, lo que me dieron mis padres y una subvenión de CEDER, restauré la casa de mis abuelos en el pueblo, la hice casa rural y en lo que eran las cuadras, he montado un pequeño bar restaurante, que en realidad es lo que me permite vivir. He conseguido comprar cuatro borricos y los alquilo a los turistas. También hago de guía de senderismo.
Como ciertos días del año no doy abasto con los turistas, contrato a una chica que me ayuda en la cocina del bar-restaurante y a un hombre del pueblo que me cuida en sus ratos libres a los borricos.
ESTO ME CONVIERTE EN EMPRESARIO.
Ahora pregunto a Wesex y los demás proleterios:
¿Que pensais hacer conmigo?
Atacarme ,claro.
¿Me vais a cortar el cuello?
¿Me vais a dar el paseo como en el 36?
¿O serieis más civilizados y me nacionalizareis mi casa rural, mis borricos y mi bareto?
Igual que yo cualquiera puede ser empresario-incluso vosotros- solo hace falta decisión, una idea y arriesgarse, esto último es lo más dificil y hay que ser valiente.
Y hay que hablar menos mal de los empresarios y conocerlos un poco mejor.