
Estoy hasta los mismisimos de ser Restospaña, al final acabaré dándole la razón en todo a Tagus.
No es ya que los castellanos estemos repartidos por varias autonomÃas divididas (que nos anula, nos hunde en la naderÃa, nos hace perder sinergÃas polÃticas y económicas, nos empobrece pues) y ninguneadas, de segunda y de vÃa lenta, sino que el Estado es claramente properiferia, periferista, y anticastellano desde el siglo XIX, es que no teniendo bastante con expoliarnos agua (Cerneja-Ordunte, Tajo-Segura,...) también nos roban, nos trincan nuestros impuestos y hasta acabamos pagandoles por robarnos, por hundirnos en la miseria. ¿Somos imbéciles o qué? la única región que denuncia a las claras el expolio fiscal que supone estar en el régimen común es cataluña, con razón, pero ojito porque no aspira a remediralo sino a copiarlo y encima tienen la cara dura de acusarnos a los castellanos de expoliadores. me jode reconocerlo porque siempre he sido defensor de una España unida siempre que sea bajo los criterios de igualdad de derechos y deberes pero... ¿para esto queremos España? os dejo el artÃculo, espero no se os indigeste como a mÃ

porque es ciertamente vomitivo, tanto como cierto (os pongo el enlace de El Confidencial y recomiendo os fijeis como está el foro del mismo de caliente. Chicos, el castellanismo tiene material y razones para triunfar, para crecer, para quejarse, para prender...:
http://www.elconfidencial.com/espana/2012/05/21/el-regimen-foral-del-pais-vasco-le-cuesta-al-resto-de-regiones-1800-millones-en-iva-98391/UN INFORME PUBLICADO POR UNA REVISTA DE HACIENDA DENUNCIA LOS PRIVILEGIOS
El régimen foral del PaÃs Vasco le cuesta al resto de regiones 1.800 millones en IVA Carlos Sánchez - SÃgueme en Twitter 21/05/2012 (06:00h)
El informe no deja lugar a dudas. Y su conclusión es que las regiones españolas del régimen común -todas salvo las que se benefician de un sistema foral- ‘subvencionan’ cada año al PaÃs Vasco en 1.820 millones de euros debido al cálculo que hace el Estado sobre la recaudación por IVA.
Cataluña, Madrid y AndalucÃa son, con diferencia, las comunidades autónomas más perjudicadas por el procedimiento. En todos los casos, por encima de los 300 millones de euros anuales que se transfieren de forma ilegÃtima respecto de lo que en realidad corresponderÃa si se aplicará la norma según lo recaudado. Con más de cien millones de euros de aportación adicional y menos de 200 millones aparecen Castilla y León, Galicia y la Comunidad Valenciana. El resto de regiones aporta menos de 100 millones al PaÃs Vasco sin ninguna contraprestación.
Los cálculos aparecen publicados en Crónica Tributaria, una revista editada por un órgano oficial -el Instituto de Estudios Fiscales-, y los ha elaborado Javier Vicente Matilla, inspector de la Agencia Tributaria. Y parten del hecho de que si la recaudación total del IVA en todo el territorio español se situó en 2008 en 43.914 millones de euros, al PaÃs Vasco le corresponderÃa ingresar -en función de sus Ãndices de consumo- 2.469 millones. Sin embargo, logra 4.289 millones del Estado, lo que significa que la diferencia (esos 1.820 millones) es lo que subvencionan las regiones del régimen común a Euskadi. Todas excepto Navarra, que también dispone de un régimen foral.
Según sus cálculos, el consumo del PaÃs Vasco representa el 5,6% del conjunto de España; mientras que el Producto Interior Bruto (PIB) es del 6,3%. Sin embargo, el Ãndice de capacidad recaudatoria fijado en el cupo –la cantidad que paga cada año el PaÃs Vasco para sufragar los gastos generales del Estado- es del 5’7%.
Este porcentaje es muy inferior al Ãndice de recaudación real, que es del 7’2%, aunque después del correspondiente ‘ajuste’ se transforma en el 8’3%. Esas diferencias entre lo que ingresa el PaÃs Vasco gracias al Cupo y lo que deberÃa ingresar, son las que explican las transferencias de rentas hacia el PaÃs Vasco procedentes del resto de regiones, cuyo nivel de riqueza es muy inferior.
Distorsiones y enriquecimiento
En palabra de Esteban Matilla, estamos ante la aplicación de unos “Ãndices polÃticos†que nada tiene que ver con la realidad, lo que produce enormes distorsiones en la distribución de la carga fiscal entre comunidades autónomas. En concreto, el Ãndice de capacidad recaudatoria asignado en el cupo (artÃculo 14) es muy inferior a la recaudación real, lo que supone menor aportación al Estado, y el Ãndice de consumo establecido para el PaÃs Vasco es muy superior al real, lo que supone que “el PaÃs Vasco tenga una mayor participación en el IVA ingresado en el Estadoâ€.
Estos dos efectos, por un lado lo que el PaÃs Vasco deja de pagar al Estado, y, por otro, lo que el Estado le paga de más, producen, en opinión del autor del informe, “una distorsión que determina el enriquecimiento de las administraciones forales, en perjuicio del resto de comunidades autónomasâ€.
Según el autor del artÃculo, el sistema del Cupo -regulado por el Concierto Económico- es unidireccional, ya que solamente paga el Estado. Hasta el punto de que los niveles de fraude en el IVA que reconoce la Administración central, y que, por lo tanto, aminoran las entregas, no se aplican en el caso del PaÃs Vasco. Y ese fraude es el que se deduce de los ajustes sobre el consumo. El último Concierto Económico se firmó en 2007 y tiene vigencia hasta 2011, igual que la metodologÃa de elaboración del cupo
Esta realidad se produce pese a que el Tribunal Superior de Justicia del PaÃs Vasco estableció en una sentencia del año 2008 que se deberÃan evitar sistema tributarios “privilegiadosâ€. El resultado, sin embargo, es que la presión fiscal efectiva en el PaÃs Vasco es menor de la que existe en el resto del territorio.
El estudio publicado por Crónica Tributaria no es, desde luego, el único ni el primero que alcanza esas conclusiones. El economista Ãngel de la Fuente, del Instituto de Análisis Económico del CSIC –otro organismo oficial publicó otro estudio en el que concluÃa que la contribución del PaÃs Vasco a la Hacienda estatal es “muy inferior a lo que deberÃa ser de acuerdo con la legislación básica actualmente en vigorâ€.
El origen del desajuste, sostenÃa De la Fuente, está en las leyes quinquenales del Cupo, donde los principios y procedimientos de valoración establecidos en la ley del Concierto se concretan de una forma “muy discutibleâ€. Los problemas fundamentales que detectaban eran dos. Primero, la valoración de las cargas estatales no asumidas por el PaÃs Vasco está “fuertemente sesgada a la bajaâ€. Y, segundo, el ajuste por IVA se realiza utilizando valores desfasados de los coeficientes que recogen el peso del PaÃs Vasco en el consumo nacional y en la base del impuesto.
El efecto conjunto de ambos factores ha sido el de rebajar la contribución vasca a los gastos del Estado en 2.800 millones de euros en 2002 y en casi 4.500 millones en 2007.

