Claro que no van a pedir el voto al PCE(r), el brazo político del GRAPO, ni al PCPE (prosoviéticos aún, por cierto, en Castilla son ex-IzCa

), porque, además de no haber católicos, pues es que esta gente aplica el materialismo dialéctico a marchamartillo, y ese apotegma del "la eligión es el opio del pueblo", y claro, así, pues no...

El problema que yo veo es de valentía. La iglesia tiene que asumir riesgos y ser valiente y decir lo que piensa y quiere a la cara. Que sea má explícita. Vamos a ver, si el 70% de los habitantes de la península ibérica bajo soberanía del Estado español

-vamos, España

-, se reconocen en algún grado de compromiso con la fe y prácticas católicas, pues debería ser más valiente. Aunque, es verdad, la mayoría de las ovejas hoy día van por su cuenta, y poco caso hacen a todas las indicaciones que los pastores -los politicos y empresarios con sotana- hacen a la grey...
Pero, repito, hay que ser valientes: los Pastores de la Iglesia están cada vez más influidos pues por lecturas políticas de gentes que no entienden que es la separación Iglesia/Estado, que creen todavía en el Estado Católico. Al fondo hay un paisaje de Donoso Cortés, y del fundamentalismo católico activo, y me temo que antiliberal (salvo en economía...). Muchos Pastores leen demasaido la revista Verbo, libros de la editorial Speiro y asisten mucho a las conferencias de los "Amigos de la Ciudad Católica". Por ahí andan Miguel Ayuso, Álvaro d'Ors, el frente de masas entorno a Mapfre y en definitiva, a católicos políticos....
El problema es que no son valientes: se retractan. Les pasa como a muchos sindicatos. Estar subvencionados o privilegiados fiscalmente les hace serviles y cautos. Pero ellos dejan caer sus mensajes, dan un pasito p'alante o hacen un guiño. Señalan con el dedo y establecen una escala cromático desde los colores más obscuros a los más claros. En los más obscuros encontramos a los que defienden la doctrina social de la Iglesia de manera más consecuente, electoralmente inoperantes, pero dignos de elogio. A medida que se va a aclarando, son paulatinamente menos consecuentes, pero, curiosos, siendo "realistas" (y la Iglesia lo es mucho...), reciben más votos... hasta que también las tonalidades más claras, las menos consecuentes con la doctrina social de la Iglesia según sus Pastores, les vuelve a pasar los mismo que a las más obscuras: menos votos. Gracias a señalarme con el dedo, puedo tener un punto de referencia para establecer una escala de valoración, donde, curiosamente, seguro que a más izquierda, la Iglesia lo considerará más "siniestra"

(¡ay las etimologías y el idioma católico por excelencia, el latín, tan presente en nuestros pensamientos).
Pero no hay valentía. Tiran la piedra, pero esconden la mano. Apuntan con el dedo acusador, pero la realpolitik les impide pedir EXPLÍCITAMENTE el voto a las candidaturas de color "obscuro", más o menos consecuentes, pero "obscuras"...
Claro:
(1) Por explicitar las preferencias de voto, seguro que habría un revuelo en mi patio. ¿Qué pasaría si doy una orientación práctica de voto contraria a los sentimientos e intereses de muchos católicos que votasen opciones diferentes, o menos consecuentes? Cuidado que hay que proteger el mercado religioso, y luego muchos cristianos se me hacen protestantes...
(2) ¿Y si gobernasen los que no son de los míos y me cerrasen el grifo de los privilegios fiscales, educativos y sociales a través del Estado y tuviera que financiarme de mis propias arcas (un Estado extranjero) o de mi menguada grey?
Para buen entendedor, ya han dicho lo que tenían que decir, ya está establecida el campo de juego, el continuum "muy consecuentes-consecuentes-poco consecuentes o tibios- algo contrarios- bastante contrarios-siniestros", pero si confesarse públicamente por ninguno... Como los Ultrassur, la Iglesia, siempre fieles.
Luego no nos puede extrañar que el Papa Benedicto XVI de viaje por O Brasil maldiga el marxismo. Él y sus antecesores dan hostias a todos, absolutamente a todos, aunque sus hostias son, digamos, distintas, algo así como le pasa a la administración yankee, según que "dictaduras": a la democracia orgánica de Pinochet y sus políticas económicas de sus Chicago Boys un tipo de hostia, a la democracia electoral de Chaves y sus políticas económicas, pues otro tipo de hostia

...

