Es cierto, tan brillantes argumentos como usas, Paramero, y con tanto descaro, los usaban hace 300 años para que una minoría gobernase a unamayoría.
Pero ya sabemos que el anticastellano, el miope,etc... eran y somos los liberales, que defendíamos y defendemos el derecho a un hombre un voto, porque todos tenemos que ser iguales ante la ley y la democracia, independientemente de CUALQUIER otra consideracón.
Para los amigos del apartheid, del privilegio y de la discriminación(castellanistas de pro, portadores de la verdad absoluta, y de una vista de lince), la nobleza del antiguo régimen, la aristocracia intelectual ateniense o el puro esclavismo electivo sudafricano, lo mas normal del mundo es que el voto y los derechos elementales de cada persona dependan de diversas consideraciones, como la clase social, el color de la piel, la residencia o la capacidad intelectual.
Perdona la miopía de los que defendemos que un estado es de todos por igual, y no de unos mas que otros, perdona la ceguera de quienes aún creemos y defendemos la igualdad política y jurídica de todos los ciudadanos, sin discriminación alguna por absolutamente ningún motivo, perdona(en fin) que los nacionalistas españoles(anticastellanos, of course) defendamos cosas tan elementalales que se recogen en todas las constituciones occidentales democráticas y en la carta de los derechos humanos.
No existe un estado mundial, y si existiera me parecería perfecto que cada persona valiese lo mismo, no como otros que si por ellos fuere, seguiríamos con Luis XIV....si a ellos les conveniese claro¡.
Todo por conveniencia, abajo los principios¡.